Además de la tasa, están obligadas a contratar gestores autorizados

La Asociación de Empresarios de Arganda, Rivas y comarca (ASEARCO) ha solicitado al Ayuntamiento de Arganda la no sujeción a la tasa de basura en el caso de las empresas  del polígono industrial que se vean obligadas a contratar gestores autorizados de residuos.

El consistorio argandeño ha enviado un comunicado en el que se solicita que contraten a una empresa externa para recoger y gestionar los materiales sobrantes y de deshecho las fábricas con residuos industriales  y negocios con residuos valorizables (cartón, plástico, maderas metales, etc. Estos residuos, se informó, no pueden depositarse en los contenedores municipales.

De este modo, estas empresas además de abonar la tasa de basuras tienen que pagar los servicios de recogida de un gestor externo, en un entorno de inflación desbocada donde los negocios han de encajar costes desmedidos de suministros, logística y transportes, entre otros.

La Asociación de Empresarios  defiende que se tiene que “evitar la duplicidad de costes en el abono de tasas o precios públicos en la recogida de residuos”. En este sentido, existen ejemplos de ayuntamientos en nuestro país que eximen del pago de este tributo a las industrias que cuidan la gestión de sus residuos a través de empresas autorizadas.

Además, ASEARCO, a través de su petición formal al Ayuntamiento de Arganda, deja claro el compromiso  que siempre han mostrado las empresas argandeñas con el cuidado y la preservación del medioambiente de su entorno. Aquellas que deban contratar los servicios de las empresas gestoras, además, tendrán la oportunidad de seguir siendo “cuidadosas a la hora de depositar los residuos por fracción con el gestor autorizado con el que suscriban el contrato. Ello no supondrá un impedimento para la descarga de los vehículos recolectores en la planta de tratamiento de residuos”.

ASEARCO también solicita al Ayuntamiento una labor de información más intensa a la hora de explicar a las empresas afectadas cómo solicitar contenedores de residuos especiales o de mayor capacidad y adecuados a este fin. “De esta manera, aquellas empresas cuyo volumen de residuos domésticos no exceda de lo permitido según la normativa, podrán seguir siendo beneficiarias de los servicios municipales de recogida de residuos especiales (cartón, vidrio, papel y plástico)”, en palabras de la petición realizada por la asociación de empresarios.

Esta petición también viene originada por la situación de desconcierto que este asunto ha suscitado entre empresarios industriales argandeños.

Miguel Garrido, presidente de la patronal madrileña, CEIM,  ha escrito una carta al alcalde Arganda apoyando las peticiones de los empresarios industriales de la ciudad.

El presidente de CEIM argumenta, además, que “las empresas madrileñas están muy comprometidas con la transición hacia un modelo de economía circular, basado en la reducción, reutilización y reciclaje de los residuos, si bien es cierto que las obligaciones medioambientales son cada vez mayores y más exigentes.

Es por ello por lo que desde las Asociaciones Empresariales solicitamos reiteradamente a las distintas a las administraciones públicas políticas medioambientales incentivadoras y no únicamente penalizadoras, así como que se proporcione a las empresas herramientas que les facilite el tránsito a las nuevas exigencias medioambientales”.

Una vez más la Asociación de Empresarios, ASEARCO, ha solicitado una reunión con el alcalde de Arganda, Guillermo Hita, y con los miembros del Pacto Local para poder debatir y consensuar esta y otro tipo de demandas del tejido empresarial argandeño. Es el caso, por ejemplo, de la solicitud de reducción del IBI  a las empresas que tienen valores catastrales superiores a los 500.000 euros. Recordamos que este año han tenido que sufrir en sus cuentas de resultados el mazazo de un recibo que supone una subida de casi un 130% . Una vez más la asociación quiere transmitir que muchas de estas empresas afectadas no son  grandes multinacionales, son pymes, negocios familiares, cooperativas, sin grandes estructuras empresariales, sin sólidos recursos financieros, que cuentan con espacio amplios necesarios para su actividad, pero de los que no  sacan rendimiento económico suficiente para justificar un incremento tan desproporcionado. Los miembros del Pacto Local de Arganda no se reúnen desde el año pasado.