31
Oct
2019
KifKif recuerda que es obligatoria la formación en diversidad afectivo-sexual en los colegios Imprimir
Zona Este - Sociedad Alcalá
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Foto cedida por CAMAsí lo exige la Ley contra la LGTBIFobia de la Comunidad

Kifkif, asociación de Migrantes y Refugiados Lesbianas, Gays, Trans y Bisexuales, junto a la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Trans y Bisexuales (FELGTB) recuerda a las Consejería de Educación que, según la legislación actual, los centros educativos de nuestra región tienen la obligación de ofrecer educación en diversidad afectivo-sexual, familiar y de género. Sin embargo, en la actualidad, en la Comunidad de Madrid este tipo de formación no se ha implementado como se debería, teniendo que ser asumida casi en su totalidad por las entidades sociales.

La asociación de migrantes y refugiados LGTB recuerda que diversa legislación nacional (como la Ley Orgánica para la Mejora de la Educación - LOMCE, la Ley de Infancia y Adolescencia de 2015, la Ley de Fomento de la Educación y la Cultura de la Paz e incluso la propia Constitución Española o la Convención de los Derechos del Niño), así como la propia Ley 3/2016 de Protección Integral contra la LGTBifobia y la Discriminación por Razón de Orientación e Identidad Sexual en la Comunidad de Madrid, establecen la obligatoriedad de que los poderes públicos adopten medidas educativas para combatir la discriminación y la violencia que sufre la infancia y la adolescencia, además de para garantizar el pleno desarrollo de la personalidad y de la formación en valores de respeto a la diversidad LGTBI+.

Así, Kifkif declara que la Consejería de Educación tiene, por tanto, la obligación de garantizar que todo el alumnado, independientemente de la opinión de sus familias, reciba formación en diversidad LGTBI, así como de proteger a los menores de la posible violencia familiar o de la negación de acceso a información motivada por LGTBIfobia. Y es que, tal y como manifiestan, solicitar el consentimiento de las familias para que elijan la educación que recibe o no el alumnado, tal y como está defendiendo la ultraderecha, contraviene el interés superior del menor, presente en el ordenamiento jurídico español.

Por este motivo, Kifkif solicita a la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid que, tal y como ya han realizado en otras Comunidades Autónomas (como es el caso de Canarias), recuerde a través de un documento escrito a sus centros educativos la necesidad y la obligatoriedad de implantar este tipo de formación en sus aulas y de ofrecerla a la totalidad del alumnado. El portavoz de la entidad, Javier Navarro, asegura que “somos un colectivo que confía plenamente en la labor del personal docente en la Comunidad de Madrid. Nos consta de primera mano su profesionalidad, predisposición y cercanía hacia la diversidad existente en nuestra sociedad, por lo que entendemos que quizá se deba a un tema de desconocimiento legislativo o de falta de recursos”.

Por este motivo, instamos a la Consejería a que trabaje para facilitar a los centros educativos las herramientas necesarias para que puedan ofrecer formaciones en diversidad LGTBI y cumplan así con lo recogido en el Capítulo XI de la mencionada ley 3/2016 de la Comunidad de Madrid, que establece en su artículo 29 que “se elaborará una Estrategia integral de educación y diversidad sexual e identidad o expresión de género, aplicándose las medidas de este plan en todos los niveles y etapas formativas siendo de obligado cumplimiento para todos los centros educativos”.

En este sentido, Javier Navarro recuerda que “nuestra asociación dispone de todo un programa formativo en valores de respeto a la diversidad LGBTI y de procedencias que en el curso 2018-2019 formó a más de 5000 estudiantes de toda la Comunidad de Madrid, encontrándose de nuevo en este curso a disposición de aquellos centros educativos que así nos lo requieran”.

La demanda se enmarca en la campaña “Tienen derecho a saber”, iniciativa de FELGTB a la que se han sumado entidades de distintas Comunidades Autónomas para exigir de manera simultánea a sus respectivas Consejerías que cumplan con esta obligada responsabilidad. Además, se trata de una campaña que pretende ofrecer una herramienta a la ciudadanía para que reivindique sus derechos en este sentido por lo que invita a la población a sumarse y enviar sus propias cartas con esta demanda a las Administraciones públicas.

Según Javier Navarro, “la intención de esta acción es recordar a los poderes públicos su obligación de cumplir y defender la legislación actual en materia educativa y disipar las dudas que puedan estar surgiendo como consecuencia de las campañas sensacionalistas promovidas por organizaciones y partidos políticos que no comparten los valores constitucionales, por mucho que los usen por bandera para hablar de otros temas”.

En este sentido, Javier Navarro recuerda que “la Educación es un derecho de los menores, no un privilegio de las familias que están de acuerdo en que sus menores se formen. Igual que el alumnado tiene derecho a formarse en matemáticas, en inglés o seguridad vial, tiene derecho a formarse en educación afectivo-sexual, familiar y de género”.

Y es que, según Javier Navarro, la aplicación de un “PIN parental” que la ultraderecha ya está instaurando en algunas autonomías y que están promoviendo en la Comunidad de Madrid “abre la puerta a que el sistema educativo reconozca también como válidas otras ideas discriminatorias como el racismo o la misoginia, u otras corrientes de pensamiento que pueden incluso poner en riesgo la salud de los menores, como las creencias contrarias a la vacunación”.

Además, explica que el uso del término PIN parental pretende generar una falsa sensación de protección a las familias. Así, añade que “el PIN parental real protege a la infancia de contenidos inadecuados cuando navega a solas por Internet. Sin embargo, este mal llamado “PIN parental” no es más que un intento de censura que vulnera los derechos de menores y docentes y anima al incumplimiento de las leyes”. “El alumnado no necesita un PIN parental para la escuela puesto que el conjunto de expertos en educación e infancia que conforma la comunidad educativa vela tanto por su bienestar en el entorno escolar, como por la conveniencia de los contenidos que estudian a cada edad”, declara el portavoz de Kifkif.