Desapareció en la tarde del sábado cuando se bañaba con amigos

Este sábado un trágico suceso ocurría en el pantano de San Juan, donde un hombre de 30 años desapareció mientras se bañaba con amigos. La desaparición tuvo lugar el sábado a las 18:30 horas, en una zona conocida como la cala del Tiburón, un lugar frecuentado por bañistas.

Los amigos del hombre, al notar su ausencia mientras regresaban a la orilla, decidieron actuar rápidamente. Inmediatamente, llamaron al servicio de Emergencias 112 de la Comunidad de Madrid para reportar la situación. A partir de ese momento, se inició una búsqueda intensiva que se extendió desde las 18:30 hasta las 23:00 horas del mismo día. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos, no se logró localizar al desaparecido durante esa jornada.

Al día siguiente, el domingo, la Guardia Civil, a través de su Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS), asumió la responsabilidad de la búsqueda. Este equipo especializado llevó a cabo inmersiones en el pantano, utilizando su experiencia y recursos para localizar al hombre desaparecido.

A las 12:30 horas del domingo, el equipo GEAS logró encontrar el cuerpo sin vida del hombre a una profundidad de 12 metros y a 10 metros de la orilla. Este hallazgo marcó el final de la angustiosa búsqueda que había comenzado el día anterior.

Una vez recuperado el cuerpo, se procedió a trasladarlo a un lugar seguro. Allí, se realizaría el levantamiento del cadáver, que posteriormente sería enviado al instituto de medicina legal para llevar a cabo la autopsia correspondiente. Este proceso es habitual en casos de fallecimientos no naturales, ya que permite determinar la causa de la muerte.

En respuesta a la tragedia, un equipo de psicólogos del Servicio de Urgencias Médicas de Madrid (SUMMA) 112 fue desplegado para ofrecer apoyo emocional a los amigos y familiares del hombre desaparecido. Este tipo de asistencia es crucial en situaciones de crisis, donde el impacto emocional puede ser significativo.