29
May
2020
Políticos, patronal y sindicatos pactan flexibilizar las horas de entrada en los puestos de trabajo Imprimir
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Foto cedida por Ayuntamiento de MadridPara reducir la incidencia de la hora punta

La Comunidad de Madrid y el Ayuntamiento de la capital han presentado una iniciativa para promover la movilidad sostenible y reducir la hora punta en el transporte público, impulsando la colaboración entre las Administraciones públicas y el sector privado.

El consejero de Transportes, Movilidad e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, y la vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, han mantenido un encuentro con representantes empresariales, sindicales y de distintas entidades de la sociedad civil para impulsar medidas conjuntas que contribuyan a flexibilizar la hora de entrada y salida al trabajo y, así, evitar las aglomeraciones en el transporte público.

Las propuestas se han condensado en una carta de adhesión en la que, bajo el título Avanzando juntos hacia una movilidad sostenible, se invita a entidades y organizaciones a comprometerse, junto con las Administraciones públicas, a laminar la curva de la demanda del sistema de transporte público y reducir la presión o necesidad de uso del vehículo privado respecto a los niveles anteriores a la crisis.

En el encuentro han participado, entre otros, el presidente de CEIM, Miguel Garrido, el de Cepyme, Gerardo Cuerva, representantes de los sindicatos mayoritarios, del Grupo Español de Crecimiento Verde, del Foro de Empresas por Madrid, de la Conferencia de Rectores de las Universidades Públicas de Madrid y de la Red Española para el Desarrollo Sostenible.

“La crisis sanitaria derivada del coronavirus y las medidas de distanciamiento que deberán mantenerse van a limitar de manera muy significativa la capacidad de la red transporte público en la Comunidad de Madrid. De ahí la importancia de la colaboración entre las Administraciones públicas, entidades y el sector privado para tomar medidas conjuntas, que el transporte público continúe siendo un pilar clave en la movilidad segura y sostenible de nuestra región y no se le estigmatice”, ha apuntado Garrido.

En este sentido, el consejero ha recordado, como ejemplo, el grupo de trabajo que la Comunidad ya tiene en marcha con las universidades públicas madrileñas para crear planes de movilidad sostenible en los campus.

La iniciativa, impulsada por Villacís con el respaldo de la plataforma El Día Después, busca a corto plazo que Administraciones y sector privado colaboren activamente, durante las fases de desescalada, para reducir la presión sobre la hora punta en el transporte público y alcanzar una reducción de, al menos, un 30% en los desplazamientos realizados por sus empleados a los puestos de trabajo en sus sedes corporativas respecto a los niveles anteriores a la crisis sanitaria.

A medio y largo plazo, y con el fin de asentar y consolidar unas prácticas de movilidad saludable y sostenible en Madrid, quienes suscriban la iniciativa se comprometen a analizar las necesidades y alternativas de transporte de sus empleados. En este análisis, contemplarán la posibilidad de colaboración entre empresas y entidades vecinas que propicien sinergias en materia de movilidad.

Otro de los objetivos para mantener una distribución racional de la demanda de movilidad urbana será avanzar en la aplicación de los horarios flexibles y el teletrabajo, así como en la conciliación de la vida laboral, familiar y personal. También potenciarán el uso del transporte público y, de manera complementaria, otros modos de movilidad activa, como la peatonal o la ciclista.

Por último, el compromiso incluye establecer objetivos cuantitativos para mejorar el confort, la seguridad y la sostenibilidad de sus pautas de movilidad, y publicar periódicamente los resultados de todas las acciones que lleven a cabo.

La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, junto con el consejero de Transportes, Movilidad e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, y el representante de la plataforma El Día Después, Carlos Mataix, se han reunido este miércoles con responsables de organizaciones empresariales, sindicatos y universidades de Madrid para impulsar un compromiso conjunto que fomente la movilidad sostenible mediante la coordinación del teletrabajo y la flexibilidad horaria de los trabajadores.

Durante el encuentro, en el que también han participado el delegado de Medio Ambiente y Movilidad, Borja Carabante; el de Economía, Innovación y Empleo, Miguel Ángel Redondo, y el concejal delegado del Área de Internacionalización y Cooperación, Santiago Saura, se ha presentado la iniciativa al presidente de CEIM, Miguel Garrido; al presidente de la  Cámara de Comercio de Madrid, Ángel Asensio; al presidente del Grupo Español de Crecimiento Verde, Valentín Alfaya; al rector de la Universidad Politécnica de Madrid, Guillermo Cisneros, en representación de la Conferencia de Rectores de las Universidades Públicas de Madrid (CRUMA); y a otros representantes de organizaciones empresariales, sindicales, así como de la Red Española para el Desarrollo Sostenible.

La vicealcaldesa ha explicado que El Día Después, comunidad nacida durante el confinamiento, aglutina diversos colectivos y reflexiona sobre cómo va a cambiar la vida en la ciudades con esta pandemia. Villacís ha señalado que el acuerdo alcanzado hoy “reúne a todos los sectores comprometidos con tres objetivos muy importantes para la ciudad: gestionar la crisis sanitaria, porque lo más importante sigue siendo salvar vidas; un compromiso con el medioambiente y, por supuesto, la recuperación económica de Madrid”. Villacís ha añadido que la iniciativa presentada hoy “es un reto colectivo para la capital que se va abordar mediante la colaboración público-privada y la implicación de múltiples entidades”.

Con la desescalada, Madrid entra en una etapa de progresiva reactivación económica que va a suponer un incremento del número de desplazamientos, por lo que garantizar la salud de la ciudadanía es más importante que nunca.

La iniciativa tiene el objetivo de evitar, especialmente en la hora punta, la saturación de la capacidad del transporte público, así como posibles congestiones de la red viaria que pudieran producirse como consecuencia de una mayor preferencia por el uso del vehículo privado.

Villacís ha señalado que “el transporte público de la ciudad de Madrid está muy bien valorado por la ciudadanía pero, como consecuencia de esta pandemia y de las concentraciones que se producen en hora punta, muchos madrileños no lo utilizan”.  “Estamos hablando -ha añadido- de que los desplazamientos en hora punta suponen un 20 % del total de usos del transporte, lo que supone unos dos millones de personas, por lo que este acuerdo es básico para reducir estos desplazamientos y así evitar al máximo el número de contagios”.

En la reunión se ha presentado la carta de adhesión en la que se invita a suscribirse a las empresas y al resto de organizaciones que deseen sumarse a la iniciativa, por la que se comprometen a: reducir la presión sobre la hora punta en el transporte público; rebajar en un 30 %, respecto a los niveles precrisis, el número total de desplazamientos realizados por sus empleados a los puestos de trabajo; potenciar el uso del transporte público y, de manera complementaria, de otros modos de movilidad activa como el peatonal, ciclista o la movilidad compartida. Estos objetivos se basan en las estrategias de flexibilización de horarios, en el teletrabajo y la digitalización de las empresas y administraciones.

La iniciativa implica múltiples beneficios para Madrid y sus ciudadanos, desde el cuidado del medioambiente y la calidad del aire hasta la mejora de la conciliación de la vida laboral, familiar y personal, así como el incremento de la productividad de los empleados.

Este miércoles se debatió la iniciativa “El día después”, de la Universidad Politécnica de Madrid, impulsada por el Ayuntamiento de Madrid y la Comunidad de Madrid, para aplanar la curva de la hora punta y mejorar la movilidad. En la reunión estuvieron presentes representantes del Ayuntamiento de Madrid, la Comunidad de Madrid, la Universidad Politécnica, la Cámara de Comercio, el Grupo Español de Crecimiento Verde, la Red Española para el Desarrollo Sostenible, CEIM y los sindicatos CCOO y CSIF.

Las partes parecen estar de acuerdo en la preocupación por la calidad del aire y el medio ambiente y en no volver a la situación de partida o empeorarla; por la sanidad y la economía. Consideran imprescindible aplanar la curva de hora punta de movilidad, especialmente de 6 a 8 horas. En la actualidad el transporte público está moviendo el 25% de lo habitual y la movilidad se ha recuperado hasta un 57% de lo habitual. Y más del 20% de los viajes en la Comunidad de Madrid se producen en poco menos de dos horas. Para las partes es imprescindible realizar colaboraciones público privadas que no se queden exclusivamente en la financiación para realizar planes de movilidad en entidades públicas y empresas. Por otra parte, la política local es la que de verdad mejora la vida de la ciudadanía, resolviendo problemas reales y próximos.

Para CCOO de Madrid la iniciativa “El día después” es esperanzadora, pero hace excesivo hincapié en la participación público privada y en la libertad de horarios, y poca en las mejoras del transporte colectivo público, andar Madrid sosteniblemente, la protección de las y los trabajadores y la salud.

El sindicato ha recordado que desgraciadamente la flexibilidad de horarios y la apertura en turnos para conciliar y evitar la hora punta no se da en todos los ámbitos como debiera. El sindicato apuesta porque cualquier solución pase por el diálogo social bipartito y tripartito, sin olvidar la participación de las entidades ciudadanas de interés general.

Sobre la iniciativa CCOO manifiesta su encuentro en algunas medidas, pero remarca muchas otras que no se han considerado o de manera insuficiente, como pueden ser:

1º El transporte público colectivo es una opción imprescindible para la movilidad cotidiana en un área metropolitana de más de 6 millones de habitantes

2º El transporte público debe prestar un servicio seguro y eficiente, en condiciones de accesibilidad universal y equidad.

3º Disminuir las necesidades de desplazamientos y escalonar las horas punta: Fomentar y consolidar el teletrabajo; flexibilizar el horario de entrada y salida en los centros de trabajo; y no autorizar la urbanización de zonas periféricas que no dispongan de los servicios administrativos, educativos, socioculturales y comerciales necesarios, y que no cuenten con un plan de movilidad sostenible que contemple el transporte público en su planificación, entre otras.

4º Mejorar la oferta de transporte colectivo público (actualmente realizamos 4,48 millones de viajes menos que en 2019): asegurar una adecuada oferta de transporte público, dimensionando la red actual (cobertura y frecuencias) de acuerdo con las necesidades reales de movilidad de la población; aumentar los kilómetros de carriles bus en la ciudad y dotarlos de prioridad semafórica; en todas las principales carreteras de entrada/salida a la capital madrileña convertir uno de los carriles de circulación motorizada en carril-bus; ampliar la conexión entre los intercambiadores de transportes y los espacios productivos (polígonos industriales y empresariales) mediante autobuses lanzaderas de gran capacidad que circulen por carriles reservados; introducir un abono social para personas desempleadas y sin recursos; introducir un billete intermodal que permita cambios entre todos los medios de transporte con el mismo título; impulsar por parte de las administraciones locales un plan de mejora de la red de Cercanías de Madrid; y facilitar el acceso ciclista a las estaciones e intercambiadores de transporte público, creando zonas de estacionamiento seguro, y promover la intermodalidad Bici-TP, entre otras medidas.

5º Reforzar la seguridad sanitaria en el transporte público

6º Garantizar la financiación adecuada para mantener un transporte público de calidad

7º Revisiones periódicas en mesas de movilidad para analizar las medidas, su impacto y posibles alternativas o incorporaciones.

CCOO de Madrid ha señalado que dos meses y medio del inicio del estado de alarma es el momento de “pasar a la reactivación y a la reconstrucción”. Así lo ha manifestado el secretario general del sindicato, Jaime Cedrún, durante la presentación de forma telemática, este viernes, de un balance sobre los efectos del coronavirus en la población trabajadora de la Comunidad de Madrid.

Cedrún ha reclamado al Gobierno regional un esfuerzo para impulsar la reconstrucción, calificando de “muy escaso y raquítico” el plan presentado por el Ejecutivo madrileño. El sindicato pide inversiones en industria, en digitalización, en infraestructuras y en el sistema sociosanitario, entre otras. “CCOO de Madrid quiere pactos y acuerdos”, ha indicado Cedrún, que ha criticado la política “sectaria” de la presidenta Díaz Ayuso y el actual “escenario de bronca permanente”, que no es el mejor contexto para tratar de buscar acuerdos y soluciones.

En su balance, CCOO señala que en la región hay 421.000 personas sin empleo y 158.000 afiliados y afiliadas menos a la Seguridad Social. En cuanto a los ERTE, auténtico “dique de contención” que ha evitado que se alcance el millón de personas sin empleo, se han presentado 78.000, que afectarían a 594.000 personas. Aunque la gran mayoría de los mismos están resueltos, sí se han detectado problemas burocráticos achacables a las empresas, por lo que Cedrún recomienda a las personas afectadas que se dirijan a sus empresas y a CCOO a través del teléfono 900 30 1001 de atención laboral ante el coronavirus. Cedrún, que ha valorado el gran esfuerzo realizado por el SEPE, ha instado a este organismo a resolver sus problemas de comunicación para poder informar a todas esas familias que lo están pasando mal.

El secretario general de CCOO de Madrid ha afeado a la Comunidad de Madrid que no haya respondido a la propuesta del sindicato para complementar la prestación de las personas que están en ERTE y no llegan al salario mínimo, así como su “ausencia absoluta” en esta crisis social mientras los ayuntamientos están realizando “un gran trabajo”.

Jaime Cedrún ha hecho hincapié en que más de 200.000 familias madrileñas serían susceptibles de percibir la renta mínima de inserción. Sin embargo, este instrumento también reduce su alcance en un momento en el que debería ser clave.

Cedrún ha insistido en la importancia de que las administraciones coordinen entre ellas las políticas sociales y, en este sentido, ha pedido al delegado del Gobierno que convoque a las administraciones y a los agentes sociales para ver cómo se aplica en la región el Ingreso Mínimo Vital que va a aprobar este viernes el Gobierno de España, y qué se puede hacer para combatir las situaciones de pobreza que está generando la pandemia.

Por último, CCOO de Madrid ha denunciado la reducción de los servicios de la atención a las personas dependientes. Cedrún, además de pedir al Gobierno regional que dé los datos de las personas a las que afectado el coronavirus en las residencias madrileña, ha instado a que se “replantee” el sistema porque el actual “no sirve”. “Las residencias tienen que volver al sector público”, ha reivindicado.