La ola remite en todo el continente en vísperas de Navidad

Muy buenas noticias las que llegaban este viernes del informe del ECDC sobre la evolución de la crisis sanitaria en la Unión Europea, y es que, tal y como todo apuntaba al ver los datos de Rumanía, los contagios por Omicron provocan una ola muy explosiva con subida fulgurante de contagios, y caída igual de rápida de los mismos. Así, esta semana son buena parte de los países europeos los que mejoran la situación del anterior informe, y alguno de ellos, compañero de España en la subida de contagios.

De tal forma España es esta semana el séptimo país de Europa con menos incidencia, al registrar 378 casos por cien mil habitantes. La clave para entender la caída de dos puestos no está en el aumento de la incidencia en España, sino en la rápida mejoría de otros países cercanos, como Bulgaria, Italia o Rumanía, todos ellos por debajo de cuatrocientos. El caso de Rumanía es muy simbólico, pues, tras registrar datos por encima de mil hace menos de un mes, esta semana marca 75 casos por cien mil habitantes, siendo el único país de la Unión por debajo de cien. La media europea se sitúa en 783, con once países por encima de mil. Eso sí, tan sólo cuatro de ellos, Noruega, Dinamarca, Irlanda y Liechtenstein, empeoran los datos registrados hace siete días.

Si los datos de Europa son positivos, los de circulación de variantes no lo son tanto. Así, mientras Madrid está invadido por la nueva cepa sudafricana, el ECDC apunta a que es Delta Plus la que está haciendo estragos en el resto del país. En concreto, los datos de cribado hablan de que el 90% de los casos detectados en la última semana, 1.098 sobre un total de 145.675 contagios registrados en el país, corresponden a la cepa india, mientras que el 7,3% son contagios por Delta Plus. Omicron, a pesar del espectacular crecimiento de los últimos días, sólo supone un 2,5% de los contagios. En cifras totales, esta semana se han encontrado, por cribado, 988 casos de cepa india, 80 de Delta Plus y 27 de Omicron.

Y para entender cómo funciona Omicron, y, sobre todo, por qué no hay motivos para preocuparse, está el ejemplo de Croacia. El país reconoce que el 50% de sus contagios corresponde a la nueva cepa sudafricana, lo que ha provocado un aumento muy significativo de la incidencia, que se encuentra en 1.239 casos. Sin embargo, del mismo modo que la incidencia subió de forma fulgurante, esta semana ha caído también de forma muy contundente. Croacia marcaba, la semana pasada, casi dos mil de incidencia, y la ha rebajado en 700 puntos en siete días.

En cuanto a los datos de hospitalización de Omicron, siguen hablando por sí mismos: de los casi dos mil casos reportados en el continente, tan sólo cuatro personas han ingresado en el Hospital, y todos ellos con sintomatología muy leve. Por cierto, dos de ellos vacunados y los otros dos sin vacunar. En cuanto a las variables por edad, sigue la misma tónica que la semana anterior: la nueva cepa afecta más a las mujeres, y a la franja entre veinte y cincuenta años, muy especialmente a los veinteañeros.

Los datos de Madrid apuntan en la misma dirección que los de Europa, con un aumento muy importante de contagios (más de seis mil en los datos de este viernes), que no producen un incremento de la ocupación de UCIs (dos pacientes menos ingresados que en los datos del jueves).

De tal forma, el fin de semana comenzaba en Madrid con 621 personas ingresadas en los Hospitales, once más que el día anterior; de los que 149, dos menos que el jueves, están en la UCI. Los ingresos ascienden a 105, una cifra no vista desde la desescalada de la quinta ola, de los que doce corresponden a pacientes en estado grave. Los decesos suben de ocho a doce, mientras que los positivos se sitúan en 6.267 en el día y 8.070 actualizados. Estos más de seis mil contagios en 24 horas es una cifra que no se alcanzaba desde la tercera ola, allá por febrero de este año.