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Ene
2022
Las enfermeras preparan movilizaciones para el mes de febrero Imprimir
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Foto cedida por SATSESegún CSIT, el colapso en Atención Primaria se prolongará aún varias semanas

CSIT UNIÓN PROFESIONAL, Sindicato representativo en la Mesa Sectorial de Sanidad de la Comunidad de Madrid, advierte que las medidas que anuncia la Consejería de Sanidad cuatro semanas después de que se haya desatado el colapso en los centros de salud, son totalmente insuficientes dado que las agendas médicas siguen copadas por la actividad administrativa (no clínica) derivadas de la tramitación de las bajas laborales de los pacientes COVID.

La sexta ola del COVID-19 ha supuesto para la sanidad un incremento importante de la actividad asistencial para la sanidad madrileña. La menor gravedad de la infección por la variante Ómicron y su mayor contagiosidad ha propiciado un aumento exponencial de los casos en un corto periodo de tiempo, cuyo manejo se ha desarrollado fundamentalmente en la Atención Primaria. Los centros de salud de la Comunidad de Madrid están colapsados desde la tercera semana de diciembre debido a que una gran parte de la actividad que se ha desarrollado en los centros de salud no está justificada por la necesidad de atención clínica de las personas infectadas, sino por la actividad burocrática que supone la gestión de las bajas (incapacidad laboral IT) a los infectados.

Casi cuatro semanas después del inicio del colapso, las autoridades han anunciado “un nuevo procedimiento para tramitar simultáneamente las bajas y altas laborales de aquellos ciudadanos asintomáticos contagiados de COVID-19, que deberán permanecer únicamente siete días de aislamiento en sus domicilios”. Desde CSIT UNIÓN PROFESIONAL, Sindicato representativo entre los profesionales de la sanidad pública de la Comunidad de Madrid, consideramos que este nuevo procedimiento llega tarde y es incompleto, dado que:

·         La gestión de la baja la siguen haciendo mayoritariamente los médicos de familia de los centros de salud. Hemos de recordar que en otras comunidades autónomas esta gestión la realizan los servicios de Inspección sanitaria.

·         Este procedimiento se limita exclusivamente a los pacientes con COVID asintomáticos, olvidándose que gran parte de los infectados padecen síntomas leves y, mayoritariamente, esos pacientes van a tener una evolución similar los asintomáticos, con curación en un periodo de tiempo inferior a siete días. Al excluirles de esta posibilidad de gestión automática de la baja y el alta, estos pacientes van a requerir al menos dos consultas con su médico de familia para gestionar su baja laboral/incapacidad temporal (IT).

·         Al no haber reforzado suficientemente las Unidades de Atención Covid (UACov) con personal facultativo para que puedan asumir también la tramitación de las bajas laborales, este procedimiento sigue sin solucionar el problema de la saturación de trabajo administrativo que generan las tramitaciones de las IT para los profesionales sanitarios.

CSIT UNIÓN PROFESIONAL considera que estas medidas son insuficientes, tal y como lo fueron las que anunció la Consejería para disminuir la carga asistencial de atención primaria (puntos de toma centralizada de muestras respiratorias, potenciación del autodiagnóstico, refuerzos con profesionales sanitarios, no facultativos de las Unidades específicas de Atención COVID-19 -y con personal no sanitario los centros de atención personalizada-CAP-), cuando no tuvo en cuenta el volumen de solicitudes de tramitación de bajas laborales que requería la población. Entonces, las unidades UACov al no haberse reforzado con el suficiente número de profesionales para abordar la ingente cantidad de trabajo, se vieron desbordadas y esta actividad de tramitación de bajas, volvía a derivarse a los centros de salud.

En estos centros, las agendas de los profesionales, principalmente de los médicos de familia, ya estaban saturadas y este exceso de actividad acabó colapsando la atención primaria a partir de la tercera semana de diciembre. Los profesionales continúan soportando esta sobrecarga y exceso de trabajo para atender de la mejor manera posible a los pacientes, aunque con ello pudieran estar poniendo en riesgo su salud y, a medio plazo, la de la población madrileña.

Vista la falta efectividad de las medidas que anuncia y aplica la Comunidad de Madrid, desde CSIT UNIÓN PROFESIONAL advertimos que el colapso de los centros de salud va a continuar durante las próximas semanas, por lo que volvemos a reclamar a la Consejería de Sanidad medidas efectivas que permitan a los profesionales dedicar tiempo a los pacientes que demandan asistencia sanitaria, por COVID o por otros motivos, que realmente requieren una atención clínica.

Las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas de todo el Estado saldrán a la calle, a partir del próximo mes de febrero, para denunciar el grave deterioro de nuestro sistema sanitario y reclamar mejoras reales que acaben con la precariedad que vienen sufriendo desde hace años en sus condiciones laborales y profesionales y que la pandemia del Covid-19 ha agudizado hasta límites ya insoportables.

Así lo ha acordado el Comité Ejecutivo Estatal del Sindicato de Enfermería, SATSE, integrado por los/as secretarios/as generales de cada autonomía y el Secretariado Estatal, en una reunión celebrada hoy, martes, con carácter extraordinario, al entender que ha llegado el momento de que las cerca de 400.000 enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas de nuestro país participen activamente y den voz y testimonio en la calle y ante la sociedad de la inaceptable situación que sufren de manera estructural e indefinida y que ha empeorado durante la actual pandemia del Covid-19

“A pesar de haber sufrido la mayor crisis sanitaria de nuestra historia reciente, las distintas administraciones y partidos políticos no están a la altura dando respuesta a los múltiples problemas y deficiencias que sufre nuestro sistema sanitario y los ciudadanos/as, así como las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas. No están haciendo absolutamente nada de manera concreta y efectiva para reforzar la sanidad y mejorar la grave situación de estos profesionales”, apunta.

SATSE lleva varias semanas trabajando y planificando el nuevo escenario de acciones reivindicativas para 2022 y ahora el Comité Ejecutivo Estatal ha concretado todas ellas con la intención de impulsarlas a lo largo de este año, siendo la primera la convocatoria, el próximo mes de febrero, de numerosas concentraciones de delegados y delegadas del Sindicato, junto a los profesionales, en los hospitales y centros de salud del conjunto del Estado.

Estas nuevas acciones se suman a las ya realizadas en los meses de septiembre y diciembre de 2021 cuando el Comité Ejecutivo Estatal, en primer lugar, y, posteriormente, las delegadas y delegados de SATSE de todo el país participaron en una concentración multitudinaria frente a las puertas del Congreso de los Diputados para protestar porque nuestra sanidad se encuentra “rota, desarticulada y con un severo déficit de recursos” por la frivolidad y desidia que están demostrando las instituciones públicas y partidos políticos.

El acuerdo adoptado por el máximo órgano de decisión de la organización sindical se produce tras constatar, además, que un 96 por ciento de las enfermeras, enfermeros y el 97 por ciento de los fisioterapeutas de nuestro país consideran que ha llegado el momento de realizar movilizaciones y acciones más contundentes desde el colectivo, como manifestaciones, concentraciones en los centros sanitarios y sociosanitarios, paros parciales, huelgas y actos de protesta en las calles.

“Ha llegado la hora de ir más allá de las mesas de dialogo y negociación al ver que ninguno de los compromisos expresados al principio de la pandemia se están cumpliendo, y las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas siguen trabajando, después de dos años de pandemia, con una sobrecarga y tensión asistencial inaceptable que les ha supuesto un tremendo desgaste físico y psicológico que, además de perjudicarles a ellas y ellos, conlleva una peor atención y cuidados a más de 47 millones de personas en todo el país”, apunta.

Garantizar la seguridad asistencial de los pacientes y del conjunto de la ciudadanía será una de las principales reivindicaciones de SATSE en los próximos meses, para lo que resulta urgente desbloquear la tramitación parlamentaria de la Ley de Seguridad del Paciente y que esta norma se apruebe cuanto antes para asegurar una asignación máxima de personas por cada enfermera o enfermero en los hospitales, centros de salud y otros centros sanitarios y sociosanitarios.

SATSE reclamará también en las calles que haya plantillas suficientes de enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas en todos los servicios de salud y dejar así de estar a la cola de Europa y que se respete su dignidad profesional, posibilitando su reclasificación profesional en el Grupo A, sin subgrupos. Otra demanda esencial que forma parte del núcleo reivindicativo de SATSE es que las enfermeras y enfermeros que llevan muchos años de trayectoria profesional sufriendo unas duras condiciones laborales puedan acceder, si así lo desean, a la jubilación anticipada.

“Las enfermeras, enfermeros y fisioterapeutas estamos hartos y muy defraudados de gobiernos y partidos que no destinan los suficientes recursos y medios para nuestra sanidad pública, más ahora que estamos recibiendo ayudas de la UE, y que pretenden, además, que seamos los profesionales los que, con nuestro esfuerzo, compromiso, e, incluso, nuestra vida, mantengamos en pie un sistema que se está resquebrajando por todas partes”, concluyen desde la organización sindical.