Se trata de un curioso deporte originario de Castilla y León

Los campos de fútbol de la calle Méjico fueron el escenario elegido para la celebración, en la mañana de ayer, del XXIII Campeonato de Calva de la Comunidad de Madrid que fue organizado por el Club de Calva Coslada.

El deporte de la calva consiste en golpear un madero en forma de ángulo bastante obtuso, colocado en el suelo, con un objeto cilíndrico denominado marro. El jugador lanza el marro desde una distancia de 14,5 metros para golpear el madero por el lado levantado. Se hacen un total de 25 tiradas, siendo dos de ellas de prueba.

Este deporte es originario de Ávila, Salamanca, y parte de Zamora. Su práctica se remonta a tiempos de los iberos y los celtas. Era un deporte propio de pastores los cuáles se entretenían lanzado un canto rodado a un cuerno de vaca, aunque con el paso de tiempo el juego fue evolucionando. Se trata de un deporte muy arraigado en Castilla-León, País Vasco, Plasencia, Barcelona y Madrid.

En el Campeonato de Calva de la Comunidad de Madrid disputado en Coslada participaron “calveros" de 17 clubes. Guillermo Ceballos de Alcorcón obtuvo unos excelentes resultados al conseguir un pleno y 3 de 24 sobre 25 lanzamientos. A la entrega de premios asistió la concejala de Deportes, Mari Luz Gómez, acompañada por la concejala de Salud, Dolores Gómez.

La concejala de Deportes, Mari Luz Gómez, señaló que “el deporte de la calva cuenta con una gran tradición en muchos puntos de nuestro país desde hace varios siglos. En Coslada apostamos por seguir fomentando los deportes autóctonos como la calva, aunque se echa en falta una mayor participación femenina”.