Ecologistas en Acción ha realizado una propuesta de plan piloto de medidas de gestión para la reserva natural fluvial del río Jarama, con el objetivo de proporcionar un modelo metodológico para la implantación de medidas de gestión en el resto de reservas naturales fluviales declaradas. La cabecera de este río fue declarada reserva natural fluvial por el Consejo de Ministros en 2015, junto a otros 81 tramos fluviales de todas las cuencas hidrográficas de competencia de la Administración central.
Con la declaración de las reservas naturales fluviales, los distintos organismos de cuenca (confederaciones hidrográficas y departamentos autonómicos de gestión del agua) están obligados a desarrollar un conjunto de medidas de gestión para mantener o mejorar las condiciones ambientales por las que fueron protegidos estos tramos fluviales. Por este motivo, Ecologistas en Acción propone que la elaboración de estos planes se haga desde abajo, contando con la participación de todos los agentes sociales y administrativos involucrados en la gestión, el uso y la conservación de los ríos. Para la organización ecologista, si los planes de gestión se hacen contando con las poblaciones locales, se garantiza que las medidas propuestas se implanten sin generar conflictos. De esta forma, las comunidades locales pueden poner en valor sus ríos y considerar la figura de las reservas naturales fluviales como una oportunidad de desarrollo social y económico.
En el proceso realizado en la cabecera del río Jarama (municipios de La Hiruela, Montejo de la Sierra y El Cardoso de la Sierra) han participado más de 40 personas: representantes de colectivos de estos pueblos y de sus corporaciones locales, miembros de las Comunidades de Madrid y Castilla-La Mancha, Confederación Hidrográfica del Tajo, Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, agentes forestales, universidades madrileñas, centros de investigación, empresas de calidad del agua, así como colectivos ecologistas, de defensa de los ríos y de pescadores.
Aunque el río Jarama presenta en su cabecera, según el plan hidrológico de la cuenca del Tajo, un estado ecológico "muy bueno”, el plan de gestión establece una serie de medidas para mantener y mejorar este estado, proponiendo acciones centradas en la regeneración de la vegetación natural y en el control de las actividades que generan presión en el territorio (visitantes a la zona, ganadería, vertidos, actividad forestal, etc.)
Por otro lado, el alto Jarama es un espacio privilegiado para observar los efectos del cambio climático en los ecosistemas fluviales, ya que está apenas alterado. En este sentido, se proponen actuaciones para la investigación de los procesos hidrológicos.
Por último, estos objetivos se complementan con una serie de actuaciones que generen un mayor conocimiento y valor de la reserva natural fluvial para que éstos puedan influir de manera positiva en el desarrollo de las comunidades locales.
El documento ’Medidas para la gestión de la reserva natural fluvial del río Jarama’ forma parte del proyecto Reservas Naturales Fluviales: gestión, información y comunicación, realizado en el marco de la convocatoria de ayudas 2015 de la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.
Presentan un plan de medidas para la gestión del río
