La abstención de las izquierdas permitirá a las derechas mantener sus feudos de Madrid, Castilla y León y Murcia

Sorprendente mapa electoral el que dejan los comicios de este 26-M, ya que, si el 28-A sirvió para que el voto de izquierdas se aglutinase entorno al PSOE; esta vez ha sido el voto de derechas el que ha optado por el PP, resucitando un bipartidismo que no estaba tan muerto como parecía.

Así el PSOE ganaba las elecciones municipales, autonómicas y europeas en una noche agridulce para su bloque, ya que la caída de Podemos provoca que las derechas sumen en casi todas las autonomías. Así, tan sólo Castilla la Mancha, Extremadura, Canarias y Aragón seguirán siendo “rojas” mientras que el resto, y siempre que se cierren los pactos, se teñirán de azul.

Y la clave la tiene una vez más la participación, pues, si la izquierda se movilizó en las pasadas elecciones del 28-A, esta vez optó por quedarse en casa, propiciando mayorías de PP-Cs-Vox en buena parte de España.

En las municipales, la izquierda conservará las alcaldías de Barcelona, Valencia, Cádiz y Sevilla, perdiendo las de Madrid y Zaragoza, si bien el PSOE es, de nuevo, el partido más votado con dos mil concejales más que el PP. Podemos y Cs se desploman mientras que VOX entra con 530 concejales en toda España.

En las Europeas, también incontestable victoria del PSOE en una noche en que los partidos eurófobos subieron considerablemente en todo el continente (Le Pen en Francia, el partido Brexit en Reino Unido y Salvini en Italia, ganaron las elecciones). Volviendo a España, los socialistas lograron veinte europarlamentarios, frente a los doce del PP, los siete de Cs y los seis de Podemos. A pesar de lo que decían las encuestas, VOX entra con tres escaños, el mismo resultados que el Ahora Repúblicas de Junqueras. Los dos del partido de Puigdemont y el europarlamentario de la coalición del PNV completan los 54 europarlamentarios españoles.