23
Jul
2013
La nueva vida de Lucía Extebarría, el falso millonario y la JMJ en 13 TV Imprimir
Los Blogs del Telescopio - Interferencias
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Los foros se llenan de sospechas sobre el último ganador de Pasapalabra

Empecemos con el repaso a estos días televisivos.

En primer lugar me gustaría felicitar a los programadores de Telecinco que han dado una sabia lección de cómo se puede sacar oro de un formato tan trillado como el reallity. Y la solución ha sido sorprendente: contratar a una de las mejores escritoras de España para que  con una pizca de teatralidad se humille a si misma tras humillarla sus compañeros.

Ha nacido una estrella, es lo que pienso. Lucía Extebarría ha sabido reinventarse como fenómeno televisivo y por eso merece quedarse para siempre. Como contertulia de Sálvame o trapichera de vísceras y cotilleos varios vale un potosí. Además lo mismo le dará analizar el último polvo de Amador Mohedano que el “Caso Bárcenas”, todo sea por pagar la deuda con Hacienda.

Creo que Lucía ya no piensa ni en sus libros ni en sus lectores, se está dejando llevar por el mundo de la tele. A buen seguro que cambiará las charlas en el Ateneo por las copichuelas en la zona VIP de “La Posada de las Ánimas”. Para ganar el concurso, reconvertida en mártir, no duda explotar su faceta más lastimera y victimista para ganar el concurso, la misma conducta que ella misma hace unas semanas hubiera puesto a caer de un burro desde su atalaya periodística.

La escritora de “Beatriz y los cuerpos celestes” tiene que aguantar que le llamen pajillera, hdp, que le digan que están hartos de verla el culo o suportar un encarnizado debate sobre sus propias bragas. Lucía que no puede más desde el minuto uno, amenaza con demandar a todo y a todos por el trato al que le están sometiendo. Pero no se baja de la moto y aguanta con tenacidad numantina  y de paso sigue saliendo por la tele incrementando su caché televisivo.

El segundo tema del día lo protagoniza un tal Juanpe más conocido como “el falso millonario” de Pasapalabra. El ciudadano, gruísta en paro (o eso nos dijo) tenía una afición oculta: salir por televisión como extra. Además, acudía con asiduidad a los programas de la misma productora, donde por cinco euros y un bocadillo te tienes que tragar al menos seis horas de grabación.

Las mentes maliciosas de Internet han visto en este hobbie una profesión oculta, y muchos han visto en ello la prueba que demuestra que el concurso está amañado. Que el susodicho haya participado en “La que se avecina”, “El don de Alba”, o “Familia” ha levantado revuelo en las redes sociales que, en vez de considerarlo como un trabajillo para ganarse una pelillas, le ven como el sucesor de Bardem por el papelón que se montó durante 30 días.

He de confesaros que la estrategia no es nueva, cuando el bote del programa se acerca a la cifra récord, llaman a un bueno para que lo vacíe.

Por ejemplo, una vez se deshicieron de Paz Herrera, la esperanza de la productora para descargar el bote, contrataron a un clásico para los frikis televisivos. Javier Dávila, reconvertido en Javier, uno de los míticos magníficos de “Saber y Ganar” llegaba al plató a llevarse el bote. Pero su incapacidad y su falta de rodaje en la pantalla hicieron inviable la empresa y fue despedido (expulsado) a los pocos días. Tras un periodo de reflexión llegó Juan Pedro, un ex-gruísta en paro que en sus ratos libres se aprendió el diccionario y que de la noche a la mañana se ha convertido en supuesto millonario. Para empezar o realmente no estaba en paro o no tenía contrato por sus apariciones en televisión y por otro lado, ¿no es sospechoso que apareciera el ganador justo cuando el bote llegaba a los 1.674.000 muy cerca de los 1.524.000 del anterior récord?

Y terminando mi recorrido televisivo prestaré atención a la nunca decepcionante 13TV, donde dan palmas con las orejas por la visita del Papa a Brasil coincidiendo con la JMJ.

La cadena de los obispos ha preparado una programación especial para cubrir y el evento y para ello nos regala la compañía de Inmaculada Galván, la eterna Paloma Gómez Borrero y el cura que por la mañana da el ángelus y por las tardes se transforma en star televisiva. Así, anoche empezó la cobertura con el clamoroso fallo de seguridad de Brasil ante la visita del Papa. Hubo fieles que incluso llegaron a introducir manos e incluso el brazo dentro del coche.

Los contertulios (los vaticanistas, no Herman Tersch, que se dormía con el espectáculo) esperaban pacientemente a que empezara “El Cascabel al gato” mientras Papaloma se llenaba de gozo al ir nombrando uno a uno a los cardenales de la curia vaticana. Antonio Jiménez, tan políticamente correcto como siempre no dudo en tirar una pulla a la organización por el retraso y el asalto a su propio programa mientras que los contertulios se afilaban las garras para morder a Rajoy a la mínima que pudieran chupar cámara.

El Papa en Brasil, Lucía en Ávila y Juan Pe... ¿en el Caribe?

@BInterferencias