Una espectacular cabalgata de dos horas y media recorrió las calles de la capital

Después de atravesar medio mundo, los Reyes Magos han vuelto como cada 5 de enero al centro de Madrid, cumpliendo con la cita más esperada de la Navidad. En su recorrido han llenado las calles de la ciudad de fantasía, magia, ilusión y música. En su viaje han buscado fomentar la curiosidad que anida en todas las niñas y los niños. Y es que la curiosidad ha sido precisamente la protagonista de la cabalgata de este año, articulada en torno a un relato fantástico que ha invitado a los espectadores a estudiar la naturaleza, explorar el planeta, observar las estrellas o viajar al espacio.

Dos mil personas, doce carrozas, siete espectáculos de compañías de arte de calle y 6 desfiles a pie, han sido algunos de los 30 espectáculos con los que ha contado la Cabalgata que ha acompañado a Sus Majestades por el centro de la ciudad. La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, ha dado la bienvenida con “alegría” a los Reyes Magos a su llegada a la plaza de Cibeles. Carmena quería preguntarles detalles sobre su largo viaje “todas las cosas tan bonitas que habéis vivido, queremos saber muchas cosas de vosotros, pero sobretodo queremos que sepáis que todos los niños de Madrid están felices porque ya estáis aquí.”

Por su parte, Melchor, en nombre de Gaspar, Baltasar y el suyo propio, ha transmitido un mensaje a todos los niños: “no perdáis nunca vuestra curiosidad”, les ha dicho. “Nunca perdáis las ganas de aprender, de entender el mundo, a las personas que os rodean y, sobre todo, de saber poneros en el lugar del otro y compartir sus sentimientos”. Para terminar la alcaldesa, al igual que el pasado año, les ha pedido una cosa "muy importante" a Sus Majestades: “Madrid es muy grande, hay muchas calles, muchos barrios, por favor que no se os olvide ningún niño, ninguna niña, no dejéis a ninguno sin sus juguetes”.

Discurso Melchor

Muchas gracias, querida Alcaldesa:

Estamos muy contentos de estar hoy aquí, en esta maravillosa ciudad de Madrid. Gracias por el recibimiento que nos habéis preparado.

Queridas niñas y queridos niños:

Como cada año, no queríamos faltar a esta cita con todos vosotros. Ya sabéis que venimos de países muy lejanos. Hemos atravesado medio mundo para llegar hasta aquí. Ha sido un viaje muuuuy largo, pero sólo con ver vuestras caras de felicidad, ya sabemos que ha merecido la pena.

Para todos los Pajes y los Secretarios Reales, para Baltasar, para Gaspar y para mí, lo mejor de traeros estos regalos es ver la ilusión con que los recibís. Eso es lo más importante y también el mejor regalo que nosotros podemos recibir. Pensad en esto: hacer feliz a otra persona es de las cosas más bonitas que existen.

Hemos recibido vuestras cartas y hemos hecho todo lo posible por atender vuestras peticiones.

Pero tenéis que saber, antes que nada, que el regalo más maravilloso que os podríamos hacer ya está en vosotros: ese regalo es la Curiosidad, vuestras ganas de conocer, de entender a las personas que os rodean, de entender el mundo.

Nunca perdáis esa cualidad. Nunca perdáis las ganas de aprender. Y no estoy hablando solo del colegio. Hablo de cada día, de cada momento. De estar atentos, despiertos a lo que acontece a vuestro alrededor. Y además, de disfrutar en cualquier situación, como sólo vosotros sabéis.

Os traemos muchos regalos, quizás no todos los que habéis pedido. Pero también os traemos la alegría, la solidaridad y la empatía. ¿Sabéis lo que es la empatía? Saber ponerse en el lugar del otro y compartir sus sentimientos. Lo que tenemos que hacer con nuestros padres, hermanos, abuelos, amigos, vecinos, compañeros del colegio, pero también con aquellos niños y personas mayores que no lo están pasando bien y que no tienen la misma suerte que nosotros…

Y ahora, ya sabéis: en esta noche tan especial, acordaos de acostaros pronto para que mañana, cuando os despertéis, podáis descubrir todo lo que os hemos dejado.

Niños y niñas, recordad nuestro consejo: NO PERDÁIS NUNCA VUESTRA CURIOSIDAD.