Carmena participó en la fiesta de bienvenida a los pequeños saharauis

Manuela Carmena ha recibido a más de 60 niños y niñas, provenientes de los campamentos  de refugiados saharauis situados desde el año 1976  en la zona de la Hamada argelina de Tinduf, próxima a la frontera argelino-saharaui. La vida de estos niños y niñas, nacidos en el exilio, transcurre en unas condiciones muy duras, privados de lo más elemental, en una crisis humanitaria que se prolonga desde hace más de cuatro décadas. Su supervivencia se debe, en gran parte,  a la ayuda y cooperación internacional.

Forman parte del grupo de 233 menores que han llegado este año a la Comunidad de Madrid (80 a la capital), con el programa Vacaciones en Paz. Este es un proyecto con más de dos décadas de existencia, nacido de la iniciativa de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Madrid y, en la Comunidad de Madrid, se desarrolla a través de la Coordinadora de Asociaciones de Solidaridad con el Sahara CEAS Sahara Madrid. Los menores han venido acompañados por miembros de estas entidades y de sus familias de acogida. El mago Cliff Gabbitas, de la Fundación Abracadabra, ha puesto la nota más divertida del encuentro con un espectáculo de magia e ilusionismo.

El Ayuntamiento de Madrid, consciente de las duras condiciones en las que viven y de cómo afectan a los más pequeños, subvenciona con cerca de 60.000 euros el programa Vacaciones en Paz 2017 para permitir el acogimiento durante dos meses de 80 niños y niñas saharauis por familias madrileñas.

Una política avalada unánimemente por el Pleno municipal que, en su sesión de noviembre de 2015, aprobó la Declaración Institucional de Apoyo al Pueblo Saharaui. En ese texto todos los grupos políticos –Ahora Madrid, PP, PSOE y Ciudadanos– dejaron claro su compromiso de reforzar el programa de Vacaciones en Paz.  El respaldo económico a esta iniciativa arranca de 1996 y se prolongó hasta 2004. Fue el pasado año y tras el acuerdo plenario, cuando se retomó, destinando 58.860 euros a la subvención, que se ejecutó en su totalidad, logrando así los objetivos previstos.  La subvención está incluida en las partidas de Cooperación Internacional para el Desarrollo, que dependen de la Coordinación General de Alcaldía.

Su estancia en la capital permite no solo el intercambio intercultural  y el acercamiento a la realidad del pueblo saharaui, sino, y sobre todo, que los menores mejoren sus condiciones físicas y disfruten de un entorno que les permite alejarse de las duras condiciones que viven en el desierto, especialmente en la época estival. Su estancia en Madrid les facilita acudir a revisiones y recibir tratamientos médicos que no llegan a los campamentos   y participar de actividades lúdico-festivas, de recreo, culturales y deportivas, difíciles de imaginar en su hábitat cotidiano.