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23
Ago
2021
Almeida acaba con la lista de espera del Servicio de Comida a Domicilio para mayores PDF Imprimir E-mail
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Foto cedida por Ayuntamiento de MadridDurante el confinamiento llegó a alcanzarse una lista de espera de 444 personas

El Ayuntamiento de Madrid ha conseguido eliminar la lista de espera que desde hace años arrastraba el Servicio de Comida a Domicilio para personas mayores, que alcanzó su máxima dimensión a raíz de la pandemia y el confinamiento, cuando llegó a tener 444 usuarios. Durante el confinamiento, el Área de Familias, Igualdad y Bienestar Social tuvo que priorizar las altas urgentes, sobre todo para usuarios de los centros de día, que estuvieron cerrados durante varios meses.

En noviembre de 2020, se autorizó un refuerzo del servicio de un 23,7 %, lo que permitió agilizar las altas. Tras hacer un estudio de la lista de espera existente, desde el servicio se llamó a todas aquellas personas que se encontraban en lista de espera, actualizando la solicitud, dándoles de alta si necesitaban el servicio o de baja si ya no era necesario. Este proceso ha permitido que, en estos momentos, la lista de espera haya desaparecido por completo.

En la actualidad, una persona que solicita la incorporación a este programa recibe el alta en aproximadamente diez días si no es urgente y en 24 o 48 horas si lo es. El Servicio de Comida a Domicilio atendió en 2020 a 4.263 personas, sobre todo mayores de 65 años solos. El pasado mes de julio, la Junta de Gobierno aprobó el nuevo contrato dotado con 5,2 millones de euros, que permitirá el reparto de en torno a 800.000 menús al año y evitará que reaparezca la lista de espera.

En palabras del delegado del área social del Ayuntamiento, Pepe Aniorte, “el Servicio de Comida a Domicilio del Ayuntamiento de Madrid es fundamental para miles de personas mayores de Madrid” puesto que “cada vez hay más que necesitan que alguien les lleve la comida a su casa porque, por distintos motivos, ellos no pueden hacerlo”.

La comida a domicilio es una prestación dirigida a personas mayores de 65 años que viven solas o con personas de similar o mayor dependencia, sin red de apoyo, que presentan dificultades a la hora de elaborar la comida o bien que tienen problemas de salud provocados por un déficit nutricional. También pueden ser beneficiarias del servicio personas menores de 65 años que por su especial situación de exclusión social o de dependencia así lo requieran.

El objetivo fundamental del servicio es proporcionar una dieta compensada y variada, previniendo situaciones de malnutrición en las personas mayores y con discapacidad. En este sentido, cuenta con 18 tipos de menús que abarcan diversas patologías que puedan presentar los usuarios.

Otro aspecto importante es su carácter preventivo. El personal de entrega está formado para detectar situaciones de vulnerabilidad en los usuarios. Comprueban el estado de la comida en la nevera, se interesan por el estado de las personas y dan aviso si encuentran cualquier señal de una situación potencialmente peligrosa.

El servicio, además, contempla el préstamo, en caso de necesidad, de microondas y frigoríficos para las personas usuarias. Además, establece la elaboración de menús especiales en fiestas señaladas y cumpleaños y la entrega de pequeños obsequios en Navidad. Incluye también un servicio de biblioteca en el que los usuarios pueden solicitar libros al personal que se los presta en la siguiente visita.

En el año 2020, el Servicio de Comida a Domicilio se constituyó como una prestación esencial durante la pandemia, principalmente tras el cierre temporal de los centros de día y de los centros de mayores, lo que provocó un incremento de la demanda puntual de un 40 % durante algunos meses. El número de usuarios se incrementó un 17 % en 2020 respecto a 2019, lo que confirma una tendencia al alza que se mantiene desde 2013.

El Ayuntamiento de Madrid, a través del Área de Medio Ambiente y Movilidad, ha comenzado los trabajos para la construcción de un colector de saneamiento que recoja las aguas residuales procedentes de los nuevos desarrollos que se están llevando a cabo en las parcelas de la calle de Eduardo Barreiros, en el distrito de Villaverde, y que será compatible con la futura urbanización de dicha calle. La obra, dependiente del área que dirige Borja Carabante, supone una mejora en la capacidad de la red de saneamiento existente en la zona. El proyecto fue adjudicado por un importe de casi 1.900.000 euros y cuenta con un plazo de ejecución de ocho meses.

La calle de Eduardo Barreiros se ubica en un barrio en pleno desarrollo y, actualmente, tiene una gran carga de tráfico pesado originado por las empresas industriales ubicadas en la zona. Cuenta con viviendas de reciente construcción a un lado de la calle, además de un área de parcelas de uso industrial, ya asentadas, que han acometido su red de saneamiento interior a la red municipal existente, y otras parcelas industriales que se encuentran actualmente en desarrollo o de las que se prevé un desarrollo inminente y que necesitan su acometida urgente a la red municipal.

En el tramo situado al norte, hasta la calle de la Laguna Rodrigo, la calle de Eduardo Barreiros tiene un carril por cada sentido. En el tramo situado al sur, hasta la calle de Alcocer, tiene dos carriles por cada sentido. Y a lo largo de toda la vía se localizan zonas sin pavimentar que se utilizan como aparcamientos.

Ante el estado actual de una red de saneamiento discontinua e incompleta y la ausencia en la zona de una red de alcantarillado con capacidad suficiente para evacuar los nuevos caudales derivados del desarrollo del área, el Ayuntamiento de Madrid ha impulsado la construcción del nuevo colector, que recogerá los caudales de las aguas residuales generadas, negras y pluviales, y las conducirá al colector Butarque I (discurre por la calle de Alcocer). Este colector, emisario de la depuradora de Butarque, dispone de sección y capacidad suficiente para absorber estas aguas y adecuarse a las actuales demandas.

De los dos tramos del nuevo colector, el primero parte desde la calle de la Corte del Faraón hasta la del Lucero del Alba. Tendrá una longitud de 378 metros y se ejecutará en zanja a cielo abierto, donde se instalarán tuberías de PVC de diámetros 400 y 1.000 mm. El segundo, de 1.019 metros de longitud, discurrirá desde Lucero del Alba hasta la conexión con el colector de Butarque I, en la calle de Alcocer. La sección en este tramo será una galería de 1,80 metros de alto y un metro de ancho, y se ejecutará en excavación en mina. En este tramo se atraviesa la plataforma ferroviaria que da servicio a la parcela industrial de la planta de fabricación de vehículos PSA.

Dado que la nueva red ocupará parte de calzada y parte de la zona en tierras que actualmente se utiliza para aparcamiento, se ha considerado la reposición de estos dos tipos de pavimentos a partes iguales. Por la calle de Alcocer discurre el colector Butarque I, al cual se conectará el nuevo colector, formado por una galería de dimensiones de tres metros de ancho y 2,60 metros de altura, con un andén central de un metro de ancho. Durante la ejecución de la conexión de la nueva galería con la existente, se deberá realizar un desvío de las aguas que circulan por la red, procurando que discurran por una sola cuna. El entronque se realizará de forma que no se afecte estructuralmente a la galería existente.

 

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