Es la mitad de lo que han perdido en total las CCAA en este tiempo

La Comunidad de Madrid ha sido la región más perjudicada por el actual Sistema de Financiación Autonómica, que ha visto reducidos sus ingresos un 8,1% entre 2009 y la previsión de 2014, seis puntos más que la medida de regiones (2,1%), lo que supone que haya asumido más de la mitad (52,8%) de la caída general de ingresos que se ha producido en el conjunto de comunidades autónomas.

El consejero de Economía y Hacienda, Enrique Ossorio, recordó que el actual Modelo ha perjudicado a Madrid en todas sus vertientes: en su diseño inicial, en la evolución de los ingresos en el periodo 2009-2011, según los datos facilitados por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas la pasada semana, así como en la evolución 2009-2014, con las previsiones del propio Ministerio.

“La pérdida de 1.000 millones de financiación por parte de Madrid en el año 2013 no es un hecho aislado, cada nuevo paso que se da en la aplicación del modelo pone de manifiesto que este fue diseñado para perjudicar a Madrid mediantes distintos retorcimientos estadísticos”, subrayó el consejero de Economía y Hacienda, Enrique Ossorio.

Enrique Ossorio explicó que en 2014, la Comunidad de Madrid habrá consolidado una pérdida de 986 millones de euros respecto al año 2009, frente a una pérdida conjunta del resto de regiones de 1.868 millones de euros, lo que le sitúa como la región con peor evolución de la financiación entre 2009-2014.

Ossorio señaló que esta situación “es insostenible para nuestra región. No puede ser que la región más solidaria (3.000 millones de euros en 2013) con las comunidades con una peor capacidad fiscal y la que tiene unos indicadores macroeconómicos mejores que la media -paro, creación de empresas, afiliaciones a la seguridad social e inversión extranjera, etc- sea la más perjudicada en el sistema de financiación autonómica”. Por ello, el consejero exigió al Gobierno de la Nación que corrija las trampas del modelo que perjudican gravemente a Madrid de forma inmediata, en tanto se acometen los trabajos para reformar el actual.

La Comunidad consolidará en las entregas a cuenta para 2014, según las previsiones comunicadas en su día por el Gobierno, la pérdida de 1.000 millones de euros que ya sufrió para 2013, lo que supone que el periodo 2009-2014, Madrid vea reducidos sus ingresos casi el doble que Cataluña y más de 6 veces que Andalucía. Este descenso se ha traducido en una rebaja de los ingresos para Madrid cada año del 1,67%, frente al 0,87% de Cataluña o el 0,44% de media de las CC.AA.

Con los datos del Ministerio de Hacienda correspondientes a la evolución en el periodo 2009- 2011, que fueron comunicados el viernes pasado, la Comunidad de Madrid es la región en la que menos crecen los ingresos, un 5,25%, mientras que la media se sitúa en el 12,25%, es decir, siete puntos menos que la media. En términos de financiación per cápita, también es la que menos crece, tan solo el 4,64%, mientras la media se sitúa en el 11,71%.

Además, con la liquidación definitiva de 2011 se empeora la previsión de recursos de Madrid para el año 2013 y se da una nueva vuelta de tuerca a la financiación madrileña. De esta forma, mientras que el resto de Comunidades ven crecer sus ingresos respecto a la previsión un 1,73% (74 millones de euros más), la Comunidad de Madrid retrocede un 5,74% (19 millones de euros menos).

Enrique Ossorio afirmó que estas cifras ponen de manifiesto que la Comunidad de Madrid es la región peor financiada por habitante junto a Valencia, y percibe 1.000 euros menos per cápita que la mejor financiada. Lo mismo ocurre si comparamos la financiación respecto al PIB, la más baja de toda España (6,06%) y a lo que se queda la Comunidad respecto a lo que recauda el Estado en Madrid (17,3%), “lo que hace que se le exija a nuestra región una mayor nivel de ajuste que resulta completamente injusto”, destacó el consejero.

Si comparamos los sistemas de financiación autonómica de 2002 y el de 2009, en términos homogéneos (con un porcentaje de cesión del 33% de IRPF, 35% de IVA y 40% de Impuestos Especiales), la Comunidad de Madrid se ha visto perjudicada en 770 millones de euros, un 7,46% menos.

En este sentido, Ossorio subrayó que la necesidad de beneficiar a Cataluña en el actual modelo de financiación como consecuencia del pacto alcanzado entre Gobierno de España y el tripartito catalán originó que se retorcieran los mecanismos de cálculo de la financiación para que Madrid no se beneficiara en la misma medida, algo que unido a los errores de aplicación supone que cada año la Comunidad de Madrid pierde 2.473 millones de euros”, señaló el consejero.

Así, la metodología usada para repartir la recaudación obtenida por IVA e Impuestos Especiales, no se ajusta a la realidad, lo que resta a la Comunidad de Madrid 1.128 millones cada año.

Otro de los retorcimientos del actual modelo de financiación se aprecia en el Fondo de Competitividad, un instrumento que nació con vocación de reducir las diferencias en financiación per cápita que quedó completamente desvirtuado al introducir arbitrariamente un límite que hace que la Comunidad de Madrid pierda cada año más de 700 millones. Además, la incidencia de la evolución de los Ingresos Tributarios del Estado en el Fondo de suficiencia hace que Madrid pierda anualmente otros 154 millones.

Para frenar también la ganancia de recursos para los madrileños, se introdujo el concepto de población ajustada, en vez de la población real, a la a la hora de calcular la financiación de la sanidad, la educación y los servicios sociales. Ello provoca que la financiación se distribuya por una población que dista mucho de la que en realidad hay que atender. Este retorcimiento significó que la Comunidad de Madrid viese descender su población en 362.000 personas, lo que supone una pérdida para Madrid de 135 millones al año.

En el ámbito concreto de la Sanidad también existe un gran perjuicio para la Comunidad, ya que al tomar como referencia la población ajustada, Madrid llega a perder 634.000 personas del cómputo, gracias a un sistema de tramos de edad, ideado por el entonces Ministerio de Economía y Hacienda en un grupo de trabajo del Consejo de Política Fiscal y Financiera, en el que se reconocía expresamente que esta estructura de población a efectos sanitarios beneficiaba a Cataluña y perjudicaba a Madrid, lo que conlleva un perjuicio anual de 259 millones. Por último, en materia de dependencia se rompió con el criterio de usuario potencial utilizado desde siempre en el sistema de financiación, y se sustituyó por la dependencia reconocida. Así se penalizó nuevamente a la Comunidad, con 95 millones anuales, ya que Madrid tenía un elevado número de dependientes atendidos antes de la entrada en vigor del modelo.