04
Oct
2016
Semana de Pasión del Puño y la Rosa Imprimir
Punto D Vista - Otra mirada
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Jesús Hernández Gallardo

 

Busca ansioso, como el coyote a su presa, su manera de subsistir, su afán actual, colocado entre ceja y ceja. Dice dimitir de la secretaría general del PSOE y, a renglón seguido, se apunta a las primarias de su partido. Le ha dado fuerte la fiebre de poder, está todavía en la nube, parece que los insultos que recibió de los críticos le han motivado la vena contradictoria. Se le habrá desviado de camino la femoral, la yugular o quien sabe que sendero ha tomado su sanguinario objetivo.

No hay quien le pare, vamos a tener que hacer una barricada los que pretendemos que se aleje de cualquier cargo de responsabilidad política, aquellos que hemos visto el atajo que ha tomado y la fidelidad mantenida a su maestro Zapatero. Esperemos que acabe la racha del PSOE, la que descarriló la economía española hace poco más de cuatro años, la que nos condujo a los números rojos que tuvo que sanear Rajoy por encontrarse en la UCI económica de Europa.

Han sido los precursores de los bucaneros de Podemos, los que les han marcado la estela para el desembarco en nuestro país, al amparo de vientos fétidos provenientes de la factoría chavista. Todo tiene su momento histórico, quien siembra vientos, recoge tempestades.

Cada vez que le veo aparecer por una pantalla mediática me sobrecojo, le veo mendigando cuota de poder político, le veo encaramado a la moqueta del hemiciclo al frente de los sufridos socialistas, los que han soportado su trajín, su obstinación, su tarascada de no, no y no. Me pasmo al ver su silueta, su condenado enganche de yonki a la poltrona, su incesante cabreo con los del PP, su bestia negra, el objetivo de sus maquiavélicas partituras fúnebres.

Se calentaron los ánimos, se rasgaron las vestiduras, se partió la baraja para tanto enroque, tanta extrema pasividad, aderezada siempre con impasible negativa al futuro de su país, de sus gentes...de los suyos.

La leyenda le encuadrará en la pared de los más grises aspirantes al poder del PSOE, pelea con Zapatero para conseguir el deshonor, el record de desatino. En Ferraz achican ya todo lo que recuerde a semejante espectro, procuran dignificar la sede socialista buscando un lider que avance sin mirar para atrás.

Ha sido pesadilla sin querer, sinrazón de muchos, atasco de todos. Ahora ya, al borde del ataque de nervios, tras la representación grotesca y la amenaza de prolongar sus tesis, podemos respirar tranquilos, pensando que serán otros quienes se encarguen de marcar el rumbo de la rosa y sus pétalos, casi marchitos, dando la última bocanada de aire, el último resuello para alcanzar la pureza del futuro de España.

Ahora ya, en la recta final del desatino socialista solamente quedan dos alternativas. La primera es seguir en desacuerdo con el PP, dándole calabazas hasta el final y esperar a que truenen las urnas por tercera vez consecutiva. La otra es tragar orgullo y permitir con nobleza que gobierne el partido más votado, que debería haber sido la primera alternativa hace ya muchos meses.

 

Jesús Hernández Gallardo

Funcionario del Estado

Torrejón de Ardoz