Durante cinco días, 150 efectivos simularon un accidente de avión, el desmantelamiento de un laboratorio ilegal y un atentado terrorista

La Base Aérea de Torrejón ha sido el escenario de las Escuelas Prácticas de Riesgos Tecnológicos 2016 que en esta ocasión se ha centrado en las diferentes actuaciones ante una emergencia de naturaleza biológica.

Durante 5 días, más de 150 especialistas sanitarios, bomberos, policías, militares y científicos han realizado prácticas conjuntas de intervención en diferentes supuestos en un ambiente contaminado como pueden ser el accidente de avión, el desmantelamiento de un laboratorio clandestino o un ataque terrorista.

Entre los participantes en estas escuelas, organizadas por el Grupo de Intervención en Emergencias Tecnológicas y Medioambientales de la UME, se encuentran servicios de sanitarios como SUMMA, SAMUR, (Madrid), SEM (Catalunya), Cruz Roja, Instituto de Salud Carlos III; bomberos de Barcelona y la Generalitat de Catalunya, Bomberos de la comunidad y de la ciudad de Madrid; Guardia Civil, Policía Nacional, Ertzaintza, Policía Local de Madrid y Fuerzas Armadas entre otros (40 organismos participantes).

El Objetivo de estas escuelas ha sido poner en común los procedimientos de actuación en emergencias de carácter biológico o por terrorismo NRBQ. Esto no solo permitirá mejorar los procedimientos propios y comunes entre organismos, sino mejorar la coordinación conjunta y los apoyos mutuos. En resumen, ampliar el conocimiento de todos los intervinientes aprendiendo unos de otros.

Las actividades se ha centrado en la realización de talleres y prácticas a partir de los cuales se han extraído lecciones aprendidas para unificar criterios e intercambiar procedimientos dentro de cada grupo de trabajo (intervención, identificación, descontaminación y sanitario).

Ayer jueves 24 de noviembre, se simuló un escenario completo donde,  consecutivamente, se pusieron en práctica todas las actividades que implican estas emergencias NRBQ, incluyendo la evacuación de bajas en condiciones de biocontención, tanto por vía aérea como terrestre, hasta el hospital Central de la Defensa “Gómez  Ulla”.  A este simulacro se sumaron además 150 observadores.

Estas escuelas son resultado del convencimiento colectivo para tener una respuesta conjunta adecuada; tal vez por ello, la participación en estas escuelas va en aumento  año tras año. Consciente de la importancia de esta actividad formativa conjunta, el jefe de la UME, teniente general Alcañiz, ha querido clausurar estas escuelas agradeciendo el esfuerzo de todos y reconociendo el valor de las aportaciones de cada uno de los allí presentes.