Atascos interminables durante las tardes del sábado y domingo

Un año más volvían los atascos a Torrejón en pleno puente de la Constitución, pero esta vez en una ubicación distinta, y es que, si lo habitual ha sido hasta ahora que se situasen en las inmediaciones del montaje navideño, este año se han concentrado en las cercanías del recién inaugurado Oasiz, con la particularidad de que eso ha colapsado durante dos tardes seguidas la A-2 en ambos sentidos.

Y es que parece que nadie en Madrid ha querido perderse la inauguración del nuevo centro comercial torrejonero, que no ha dejado de recibir visitantes desde su apertura el pasado jueves. El concierto de El Chojin el viernes también provocó intensidad de tráfico, pero ha sido la llegada del fin de semana la que ha desbordado las carreteras.

Así, el sábado, desde antes de las seis de la tarde, la autovía sufría retenciones importantes en los dos sentidos de circulación, retenciones que, con el paso de las horas, acabaron alcanzando el puente de San Fernando.

Pero lo peor no estaba en la autovía, pues la Avenida de los Premios Nobel, calle interior del polígono Casablanca, y única vía de acceso al Oasiz, era incapaz de soportar el volumen de tráfico que intentaba acceder al centro comercial, y precisamente en uno de estos accesos se producía un pequeño choque entre cuatro coches en plena rotonda del avión, lo que dificultaba aun más la circulación.

Con la A-2 atascada y también los accesos al polígono, era de esperar que los coches enseguida llegasen al mismísimo barrio de Soto del Henares, con la peculiaridad, y no es menor, de que ese colapso afectó a las dos principales vías de acceso a los Hospitales de la localidad, además de imposibilitar la movilidad de los vecinos del barrio.

El domingo, más de lo mismo: la víspera del Día de la Constiución volvió a llenar de potenciales clientes el Oasiz, y las carreteras de coches en el acceso. De nuevo colas kilométricas durante varias horas hicieron la vida imposible a los vecinos de la localidad.

Mientras esto ocurría en Soto, en Fresnos la situación era bien distinta. Y es que el cobro de entrada y la restricción de aforo evitó las avalanchas vividas en los dos primeros años del Paseo de la Navidad durante el puente de la Constitución. Dentro del Recinto Ferial, muy buena entrada, pero no aglomeraciones.

Todo apunta a que estos atascos vividos durante los últimos días, y que se pueden repetir mañana, irán remitiendo cuando se pase el efecto novedad del centro comercial, si bien la afluencia lógica de clientes a un espacio de estas características cambiará para siempre la movilidad de los vecinos de Soto, al menos, los fines de semana.