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12
Jun
2023
El Primavera Sound estudiará si vuelve a Arganda el próximo año PDF Imprimir E-mail
Zona Este - Arganda del Rey
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Foto cedida por Ayuntamiento de ArgandaLas tormentas y la movilidad, problemas de una edición con más de 90.000 visitantes

Después de dos intensos días de conciertos, el Primavera Sound de Madrid echaba el cierre, y lo hacía con su continuidad en el aire. Y es que los organizadores tienen muy claro que quieren seguir en Madrid, pero no tienen tan claro que vaya a ser en la Ciudad del Rock de Arganda. De tal forma, las tormentas vividas el miércoles que convirtieron en tal barrizal el Recinto de Conciertos que impidieron la apertura de las puertas el jueves; y los problemas de movilidad registrados a lo largo de todo el transcurso del festival, han hecho que la organización se replantee si la edición de 2024 se celebrará en Arganda.

Lo que sí tiene muy claro Primavera Sound es que el balance es positivo, con más de 90.000 visitantes a lo largo del festival, y una repercusión en todo Madrid gracias a las actividades alternativas.

"El prestigioso festival Primavera Sound congregó en Arganda del Rey a unas 90.000 personas en las dos jornadas celebradas en la Ciudad del Rock, puesto que las actuaciones previstas para el jueves tuvieron que cancelarse por las previsiones meteorológicas. Esta primera edición del festival en Madrid situó a Arganda del Rey en el epicentro del panorama musical, con un cartel de auténtico lujo formado por Depeche Mode, Rosalía, Kendrick Lamar, Skrillex, Maneskin o Calvin Harris, entre otros muchos", explicaba Arganda en un comunicado.

Según la organización del evento, en la jornada del viernes fueron 42.000 las personas que asistieron al recinto, donde en los diferentes escenarios se sucedieron múltiples conciertos protagonizados por Depeche Mode, Kendrick Lamar, Skrillex o Mora, entre otros muchos. Los británicos Depeche Mode realizaron el segundo de los dos únicos conciertos que el grupo ha ofrecido en España, dentro de la gira mundial que supone el primer tour de Dave Gahan y Martin Gore como dúo tras la muerte de Andrew Fletcher.

La jornada del sábado congregó a 48.000 personas teniendo como plato fuerte a Rosalía, quien arrasó con fuerza en un concierto donde brilló junto a sus ocho bailarines, repasando sus canciones más conocidas que han hecho de ella el máximo exponente musical español en la actualidad. Junto a Rosalía también subieron al escenario el DJ escocés Calvin Harris, el grupo Maneskin, Caroline Polachek o la catalana Bad Gyal, entre otros muchos.

El balance que hace la organización es ligeramente distinto. Hablan de un festival excepcional "para lo bueno y para lo malo". Llevábamos tanto tiempo imaginando la primera edición de Primavera Sound Madrid que ya casi teníamos la sensación de haberla vivido mucho antes de que empezara, pero definitivamente aguardaba una realidad particular. Porque, una vez que se materializó el pasado lunes con los primeros conciertos en diversas salas de la ciudad, el festival ha sido lo nunca visto, lo nunca imaginado tanto en la historia de Primavera como en Madrid. Una semana que ya enfila su recta final llena de hechos excepcionales, para lo bueno y para lo no tan bueno. El relato de este estreno en la capital es sin duda un relato insólito: nunca ha habido un Primavera Sound como este, nunca ha habido un festival en Madrid como este.

Si se trata de excepcionalidad, hay que hablar de un despliegue musical incomparable, sin precedentes. Porque a fin de cuentas un festival va de música. De norte a sur. Del Cívitas Metropolitano, que acogió la jornada inaugural del miércoles con los conciertos gratuitos de Pet Shop Boys, Confidence Man y Jake Bugg en una fiesta para todo el mundo, a la Ciudad del Rock de Arganda del Rey, la sede central del festival. Superada la complicada meteorología que lamentablemente retrasó un día la apertura de puertas y condicionó el plan de movilidad, dentro esperaba un espacio reacondicionado que respira música (mucho más allá del rock como es identidad en Primavera Sound) a lo largo de sus doce escenarios. Una infinidad de itinerarios posibles para una primera edición que debe servir como aprendizaje de cara al futuro.

Sin olvidar el Auditorio Primavera con su impagable pase matutino y por supuesto la docena de salas que han vertebrado la programación de Primavera en la Ciudad… e incluso alguna sorpresa más que absolutamente nadie podía pronosticar. Porque si la actividad simultánea de once salas en la jornada del martes o la oportunidad de ver a The War On Drugs, Pet Shop Boys o St. Vincent en formato reducido ya eran acontecimientos únicos en sí mismos, el jueves se vivió directamente un milagro: el concierto improvisado de Blur en La Riviera. Su regreso a Madrid dos décadas después no pudo ser el baño de masas previsto en la Ciudad del Rock el jueves, pero sí un inesperado sueño de fan desbloqueado. En definitiva, la música no se ha detenido por completo en Primavera Sound Madrid ni siquiera con todo en contra. La suspensión de la jornada del jueves aplazó el encuentro con la Ciudad del Rock, pero no ha impedido que Primavera Sound Madrid ofrezca un festín musical marca de la casa.

El concierto que abre la jornada de un festival siempre tiene algo de simbólico. De repente, un recinto en silencio empieza a sonar. Pero ayer, cuando empezó el concierto de Carlota Flâneur para inaugurar por fin el primer escenario de la Ciudad del Rock y desencadenar un precioso efecto dominó, todo tuvo un extra de emoción que quedaría perfectamente resumido ocho horas después en el show de Fred again.. El mantra que recorrió la actuación del británico, la primera de su carrera en Madrid, puede servir perfectamente como lema espontáneo del festival tras sobreponerse a las lluvias: we gonna make it through. Lo que tenía que haber arrancado oficialmente el jueves terminó arrancando el viernes con los triunfos de Depeche Mode en el karaoke definitivo y Kendrick Lamar en la cima del hip-hop contemporáneo. Además, Japanese Breakfast asombró con sus trucos pop, Alvvays sacaron nuevo brillo a las melodías de toda la vida, Karate nos llevaron de la mano a un feliz 1998 y Four Tet desplegó su hedonismo inteligente en una jornada que congregó alrededor de 42.000 personas. Y hoy, 48.0000 más despedirán la Ciudad del Rock junto a Rosalía, St. Vincent, Bad Gyal, Calvin Harris, Caroline Polachek y My Morning Jacket.

Pese a todo, pese a toda excepcionalidad, pese a la incertidumbre que siempre rodea a una primera vez, pese a las alteraciones forzosas del plan inicial, pese a unas adversidades inéditas en la historia del festival, no cabe ninguna duda de que todo lo que ha pasado, está pasando y todavía tiene que pasar en esta primera edición conforma sin duda un Primavera Sound.

Por un cartel paritario como parte del compromiso adquirido en 2019, la prueba de que un cartel es música pero también muchas otras cosas. Por el empeño en encontrar el contexto perfecto para cada propuesta, reflejado en escenarios tan inusuales en un gran evento como el Warehouse by DICE, el Auditorio Primavera o el Boiler Room x CUPRA. Por la voluntad de tomar el pulso al futuro del sector, consumada en el Web3 Music Summit organizado por Primavera Pro y GUZZU el 7 y 8 de junio en el Espacio Cultural Serrería Belga. Por la convivencia natural de sonidos tan dispares como el folklore sabrosón de Los Hacheros, la canción de autor reformulada de Beth Orton, el nuevo góspel de Gabriels, el rock incandescente de The Mars Volta, el pop con denominación de origen japonesa de Kyary Pamyu Pamyu, el house reluciente de TSHA, el post-punk gótico de Lebanon Hanover o el reguetón con perspectiva histórica de DJ Playero ya solo en la jornada de ayer. Por la sesión de DJ Coco que hoy nos conducirá hasta el amanecer. Por la presencia innegociable de Shellac, emblema histórico del festival. Por todo, por cada detalle inconfundible, vivir esta semana ha sido vivir un Primavera Sound: es decir una experiencia diferente a cualquier otra incluso en una ciudad históricamente tan musical como Madrid. Porque hay cosas que solo son posibles aquí", concluyen.

 

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