La Ministra de Defensa acudió al acto

El pasado jueves la Plaza de la Paloma de Alcalá de Henares, que alberga los juzgados de la ciudad, acogió un emotivo homenaje a las a las víctimas de la banda terrorista ETA vinculadas a la ciudad complutense.

El acto ha contado con la asistencia de familiares, del alcalde de la ciudad, Javier Rodríguez Palacios, de la ministra de Defensa, Margarita Robles, de la delegada del Gobierno, Mercedes González, así como del Jefe de Estado Mayor de la Defensa, Teodoro Esteban López Calderón, el rector de la Universidad, José Vicente Saz, el Consejero de presidencia de la Comunidad de Madrid, Enrique López, autoridades civiles y militares, y otros miembros de la corporación municipal.

Tras el homenaje ha tenido lugar la inauguración del monumento alzado en memoria de las víctimas, todas ellas asesinadas por ETA nacidas en Alcalá, que residían en la ciudad o que fueron asesinadas en ella. El monumento está listo desde 2019, pero la Covid paralizó el acto.

Rodríguez Palacios ha explicado que la iniciativa surgió en 2018 y se aprobó por unanimidad de los grupos políticos, pero su desarrollo se ha visto aplazado por la pandemia. “El Ayuntamiento efectuó una investigación y remitió un documento a la Dirección General de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo del Ministerio del Interior, que corroboró los datos y contactó con los familiares para poder contar con su consentimiento”, explica el alcalde.

“Hoy llevamos a cabo un acto de justicia, de reparación y para preservar la memoria de las víctimas de ETA en Alcalá”, ha afirmado Rodríguez Palacios. “La intención de este acto es reparar, reconfortar y dejar constancia de lo que pasó, para que no se olvide y no se repita. A todos les asesinaron no por quiénes eran, sino por estar al servicio de España, por eso este acto era importante y también poder compartirlo con sus compañeros, con representación del Ejército, de la Policía Nacional, de la Guardia Civil, de la Policía Local. Sin seguridad no hay libertad. Para lograr el Estado de Bienestar se necesitan caminos seguros, que los delitos sean perseguidos, la base para una España mejor es la defensa, y la esa seguridad nos la otorgan los hombres y mujeres que pertenecen a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que tanto han evolucionado en los últimos años”.

Los nombres de las víctimas que aparecen en el monumento fueron asesinados en un total de 4 atentados. En 1988, en Éibar, fue asesinado el Policía Nacional José Antonio Barrado Recio, natural de Madroñera (Cáceres), estaba casado y tenía 3 hijos, fue enterrado en el cementerio de Alcalá de Henares. En 1989, ETA mató en la carretera de Alcalá Meco a los Policías Nacionales José Antonio Montes Gila y Juan Antonio García Andrés. En el atentado de la calle López de Hoyos en 1993 fueron asesinados el teniente coronel del Ejército de Tierra Javier Baró Díaz de Figueroa, el teniente coronel del Ejército de Tierra Fidel Dávila Garijo, el teniente coronel del Ejército del Aire José Alberto Carretero Sogel, el teniente coronel del Ejército del Aire Juan Romero Álvarez, el capitán de fragata de la Armada Domingo Olivo Esparza, el sargento primero de la Armada José Manuel Calvo Alonso y el funcionario civil del Ministerio de Defensa Pedro Robles López; todos ellos viajaban en una furgoneta que había salido de Alcalá de Henares, donde todos ellos residían. Y en 1994, en el atentado de la Plaza de Ramales, fue asesinado el teniente general del Ejército y director general de Política de Defensa, Francisco Veguillas Elices, natural de Alcalá de Henares.

Todos sus nombres, cargos y fechas de fallecimiento han quedado grabados en una escultura de acero – corte de 2 metros de altura, que se ha erigido en su memoria y se ha ubicado en la Plaza de la Paloma, “la ubicación se ha justificado –según explica el alcalde- por la voluntad de los familiares junto con el Ayuntamiento de situarlo en lugar público concurrido y situado en el casco histórico, vinculado con una institución del Estado como es el Poder Judicial, institución fundamental del Estado de Derecho”.

Robles junto al alcalde complutense, Javier Rodríguez Palacios, ha inaugurado bajo una lluvia intensa un monumento conmemorativo en el que figura el nombre de todas las víctimas mortales relacionadas con Alcalá, miembros del Cuerpo Nacional de Policía, de las Fuerzas Armadas y funcionarios civiles que fueron asesinados en cuatro atentados entre 1988 y 1994.

En este acto que se ha visto retrasado por la pandemia varios años, la ministra de Defensa ha destacado que España tiene una deuda de gratitud infinita con las víctimas del terrorismo, "a las que nunca vamos a olvidar", y en concreto con "estos servidores públicos asesinados por trabajar por la paz, la libertad y la democracia".

"Esta lluvia representa las lágrimas de todos y cada uno de los que estamos aquí. Ponen de relieve que nunca vamos a olvidar a las víctimas del terrorismo de ETA, o de cualquier terrorismo siempre cruel, y lleno de sinrazón", ha remarcado Robles.

Además, la ministra ha querido agradecer a toda la corporación de Alcalá de Henares "por hacer este acto hoy aquí, porque este monumento, sólido y firme, va a recordar no solo a la ciudad sino a todos los españoles, que los que murieron eran valientes, querían a España y trabajan por ella".

"Los que perdieron la vida -ha añadido Robles- tienen la autoridad moral, el valor, los principios y el coraje que nunca tuvieron sus asesinos", y los hombres y mujeres que trabajan en las Fuerzas Armadas y en las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "son los firmes herederos" de esa vocación de servicio y sacrificio con el que "quieren construir un mundo mejor".

Al homenaje han asistido la delegada del Gobierno en la Comunidad Autónoma de Madrid, Mercedes González Fernández, y el jefe de Estado Mayor de la Defensa, almirante general Teodoro E. López Calderón, entre otras autoridades civiles y militares.

Por su parte, el alcalde Javier Rodríguez ha reseñado que el monumento "sólido, sobrio, que perdurará en el recuerdo" tiene como objetivo "reparar, confortar a las familias, y decirles que no están solos" y recordar que "les mataron por estar al servicio de España".

"Pocas instituciones diferentes a las Fuerzas Armadas y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han evolucionado tanto en los últimos años…han sabido modernizarse, estar a la altura de lo que se espera de ellas, y proyectar la mejor imagen de este país en el extranjero", ha destacado.

Entre los once soldados, aviadores, marinos, policías y funcionarios estaba el teniente general del Ejército y director general de Política de Defensa, Francisco Veguillas, natural de Alcalá de Henares. ETA lo asesinó el 29 de julio de 1994 en Madrid con un coche bomba, matando también a su chófer, Francisco Martín, y al operario César García que se encontraba en la zona.

"Con él quisieron matar un símbolo, de lo mejor de este país, de la Transición, de la democracia, de ese esfuerzo colectivo del que nos sentimos orgullosos", ha sostenido el alcalde sobre Veguillas, y al que la titular de Defensa rindió especial tributo poniendo su nombre a la sala de actos de la sede del ministerio.

Las otras víctimas eran más jóvenes: tres policías nacionales, José Antonio Barrado, José Antonio Montes y Juan Antonio García Andrés, asesinados en dos atentados en 1988 y 1989, el primero un 18 de diciembre en la localidad de Eibar, y los segundos un 8 de mayo en la carretera de Alcalá-Meco.

Seis militares que residían en Alcalá y el conductor civil de la furgoneta en la que viajaban murieron en el atentado con coche bomba de la calle López de Hoyos de Madrid el 21 de junio de 1993. Eran los tenientes coroneles Javier Baró, Fidel Dávila, José Alberto Carretero y Juan Romero; el capitán de fragata Domingo Olivo; el sargento primero José Manuel Calvo y el funcionario civil Pedro Robles, destinados en el cuartel general del Estado Mayor de la Defensa.

Bajo una lluvia intensa, que finalizó nada más acabar el acto, el Grupo Municipal de VOX en el Ayuntamiento de Alcalá de Henares ha estado presente en la inauguración de un monumento en recuerdo de las once víctimas de la banda terrorista ETA asesinadas en nuestra ciudad, todas ellas miembros de las Fuerzas Armadas, funcionarios de Policía y funcionarios civiles.

En un emotivo acto, al que ha asistido la Ministra de Defensa, el Jefe del Estado Mayor de la Defensa, y demás autoridades civiles y militares, así como familiares de las víctimas, se ha recordado a quienes entregaron su vida sirviendo a España y fueron víctimas de atentados terroristas.

El Portavoz del Grupo Municipal de VOX, Javier Moreno, expresó su cariño a los familiares de las víctimas y recordó la necesidad de que las víctimas del terrorismo permanezcan siempre en nuestra memoria.

Por último, el portavoz de VOX lamentó la asistencia de la Ministra de Defensa y aseguró que “su dignidad exige que no se hable, pacte o negocie con los herederos de quienes tanto daño ha causado en nuestro país”.

“Las víctimas del terrorismo merecen memoria, dignidad y justicia, todo lo contrario a lo que está haciendo el PSOE, pactando con sus herederos”, ha concluido el edil de VOX.