El Presidente explicó que las viviendas del nuevo barrio no podrán tener más de dos alturas

El presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, visitó la Cañada Real Galiana, donde se reunió con los representantes de las asociaciones de vecinos de los seis sectores para presentarles el modelo de diseño urbanístico que propone el Gobierno regional para esta zona. González se convierte así en el primer presidente autonómico que acude a la Cañada Real para avanzar en una solución integral de desarrollo.

La Cañada Real Galiana ocupa 107 hectáreas y más de 14 kilómetros de longitud que atraviesa, de norte a sur, los municipios de Madrid -distritos de Villa de Vallecas y Vicálvaro-, Coslada y Rivas-Vaciamadrid.

Según los censos de los ayuntamientos, en la Cañada Real Galiana viven 7.725 vecinos (Rivas, 1.132; Coslada, 927; Madrid: 5.666), lo que supone un 80% menos que las primeras estimaciones que hablaban de 40.000 habitantes cuando no existía ningún dato oficial. Asimismo, existen 2.455 construcciones, de las cuales 2.272 son viviendas y el resto (183) son naves e industrias, algunas de gran actividad económica. En el encuentro, el presidente regional intercambió opiniones con los vecinos sobre el diseño urbanístico que presenta el Gobierno regional y que es similar al barrio madrileño “Rosa de Luxemburgo”, con viviendas de dos alturas como máximo, zonas verdes y espacios públicos.

Con este modelo urbanístico, que se ejecutará durante años, la Comunidad de Madrid quiere que la Cañada Real deje de ser una zona marginal con el objetivo de integrar a sus vecinos en los municipios en los que se sitúan los terrenos. Gonzalez explicó a los vecinos que se trata de una propuesta que respeta en todo momento la esencia histórica de la zona y cuya máxima pretende mantener a la mayoría de vecinos censados.

Durante la reunión, realizada en la sede de la asociación de vecinos del sector 2, los vecinos manifestaron su apoyo al modelo de desarrollo que plantea la Comunidad, un importante paso que se añade a los avances que ha dado el Gobierno regional, con Esperanza Aguirre e Ignacio González al frente, en lo referente a Cañada Real. La Comunidad de Madrid ha promovido una ley específica de la Cañada Real, que fue aprobada por la Asamblea de Madrid en marzo de 2011, para alcanzar un acuerdo y desafectar la zona; ha mantenido cerca de cien reuniones con vecinos y administraciones públicas implicadas, y ha diseñado un modelo urbanístico similar al barrio madrileño “Rosa de Luxemburgo”, con viviendas que no superen las dos alturas, zonas verdes y espacios públicos.

El borrador del proyecto urbanístico fue también explicado a las asociaciones de vecinos la semana pasada en una serie de reuniones que mantuvo el consejero de Asuntos Sociales con los representantes de cada sector, y con el Ayuntamiento de Coslada. Además, la Consejería de Asuntos Sociales presentaba este modelo al Ayuntamiento de Madrid y hoy lo hará a la Delegación del Gobierno.

La Comunidad contempla la adaptación gradual de este modelo urbanístico a la Cañada Real en función de las diferentes zonas y sectores. Por ejemplo, en la parte de Coslada (sector 1), se tendrá como prioridad el acceso de los vecinos a la propiedad y que puedan pagar sus impuestos derivados de los servicios que ya disfrutan (como recogida de basura, IBI, etc.). En Madrid y Rivas-Vaciamadrid (que incluyen sectores del 2 al 5), se llevará a cabo una adaptación gradual al diseño que se propone debido a la disposición de las edificaciones ya construidas. Paralelamente, en la zona más conflictiva de la Cañada (sector 6) se pondrá en marcha un plan de intervención social especial con un plazo de ejecución de 10 años.

Las delegadas de Urbanismo y de Familia y Servicios Sociales del Ayuntamiento de Madrid, Paz González y Dolores Navarro, respectivamente, el consejero de Asuntos Sociales del Gobierno regional, Jesús Fermosel, y asociaciones de vecinos han mantenido una reunión de trabajo sobre el futuro de Cañada Real Galiana. Ha habido sintonía entre todos para desarrollar un proyecto tan anhelado por sus habitantes. El modelo de referencia es el barrio de Rosa de Luxemburgo, en Moncloa-Aravaca.

La delegada de Urbanismo ha puesto el acento en el Plan Especial de Intervención Social para el sector VI, una zona que pertenece al término de Madrid y que requiere de medidas específicas de atención social. Próxima a Valdemingómez, en este área están censados 3.473 ciudadanos. El acuerdo implicará “atender familia por familia, y persona por persona”, ha señalado Paz González. Estudiarán caso por caso para ver a quiénes se debe realojar o qué vecinos pueden comprar el suelo.

Los objetivos urbanísticos son construir viviendas unifamiliares adosadas de protección pública, crear manzanas de viviendas con una altura máxima de dos plantas alineadas a los viales de uso casi exclusivamente peatonal y obtener la superficie de suelo mínimo exigido por la Ley 9/2001 para equipamientos e infraestructuras públicas.

Por otra parte, el alcalde de Rivas Vaciamadrid, José Masa, se ha mostrado dispuesto a seguir negociando, “como lo hemos hecho desde hace años” con las administraciones implicadas en la solución al problema más grave de exclusión social, delincuencia e ilegalidad urbanística de la región: la Cañada Real.

“Nunca hemos cerrado las puertas a la negociación. Nos sentaremos con quien haga falta siempre que haya sobre la mesa una propuesta seria respecto a un plan de intervención social que contemple el realojo de toda persona que lo necesite”, ha recordado Masa. “Al parecer, de momento no existe tal plan o al menos no nos lo ha hecho llegar la Comunidad de Madrid”, sentencia el primer edil de Rivas.

Desde el Ayuntamiento de Rivas se reitera que la Consejería de Asuntos Sociales el único documento que ha enviado por correo postal al Consistorio ripense ha sido un CD que contiene un vídeo promocional titulado ‘Propuesta de modelo urbano para la Cañada Real Galiana’. “Nos hubiera gustado leer una memoria técnica, algo más serio que imágenes idílicas e infografías”, subraya el alcalde de Rivas.

José Masa suspendió la pasada semana una reunión prevista con el consejero de Asuntos Sociales, Jesús Fermosel, ya que un día antes la Comunidad había filtrado a los medios de comunicación el contenido de la propuesta que pretendía exponer a los representantes municipales de Rivas.

El regidor ripense reitera que, a diferencia de lo que propone el Ejecutivo de Ignacio González, la solución al asentamiento de la Cañada Real “no puede basarse en actuaciones urbanísticas (estas solo serán complementarias) sino en medidas que den respuesta a la situación de exclusión social que sufren la mayoría de los seres humanos que residen en la Cañada”.

“Rivas seguirá trabajando con la Comunidad de Madrid y con las otras administraciones” ha finalizado el alcalde de Rivas. “Lo hemos estado haciendo durante años y, más recientemente, en las sesiones de los grupos de trabajo que mantuvieron 94 reuniones, de enero a julio”.