Vuelven a un sistema de listas cerradas y bloqueadas para elegir compromisarios que voten al candidato
El Partido Popular (PP) ha decidido implementar un cambio significativo en su modelo de primarias, que será presentado en su XXI congreso programado para julio. Este nuevo sistema permitirá a los afiliados votar en una única lista que incluirá tanto al candidato a la presidencia del partido como a los compromisarios, quienes posteriormente elegirán al líder del PP durante el congreso.
El nuevo modelo de primarias se describe como participativo y se asemeja a la "democracia representativa" que se utiliza en las elecciones generales en España. En este sistema, los afiliados tendrán la oportunidad de elegir a un candidato a la presidencia y a los compromisarios que lo apoyarán, quienes serán los encargados de votar al presidente del partido en el congreso.
La ponencia de Estatutos, que será debatida y votada en el congreso, fue presentada en Murcia por varias figuras destacadas del PP, incluyendo a Fernando López Miras, María Guardiola, Gema Igual y Dani Sirera. Los afiliados tienen hasta el 25 de junio para presentar enmiendas a este documento.
Históricamente, los compromisarios eran los encargados de elegir al presidente del PP. Sin embargo, en el congreso de 2017, bajo la presidencia de Mariano Rajoy, se introdujo un sistema de doble vuelta que permitía a los afiliados votar en una primera ronda. Este cambio fue influenciado por presiones de las ramas del PP en Madrid y Valencia, así como por exigencias de otras formaciones políticas como Ciudadanos.
Desde su llegada al liderazgo del PP en 2022, Alberto Núñez Feijóo ha mostrado preferencia por un sistema que se asemeje más al anterior, aunque Isabel Díaz Ayuso ha defendido la necesidad de que se cumpla el principio de "un afiliado, un voto" en todo el país.
El nuevo modelo propuesto es una combinación de primarias indirectas, donde los afiliados pueden elegir al candidato a la presidencia, pero los compromisarios tienen un papel predominante. Estos compromisarios votarán en una segunda vuelta durante el congreso, lo que busca evitar situaciones como la ocurrida en 2018, donde Soraya Sáenz de Santamaría ganó las primarias entre los afiliados, pero Pablo Casado fue elegido presidente gracias al apoyo de los compromisarios.
Según la ponencia, para ser candidato a la presidencia del PP, se requerirá el apoyo de al menos 500 afiliados, quienes deberán provenir de al menos 25 provincias diferentes, con un mínimo de 15 avalistas en cada una. Este requisito es un aumento significativo respecto a las reglas internas actuales, que solo exigen un mínimo de 100 avales.
Los compromisarios serán elegidos para participar en el congreso del partido y deberán adherirse a la lista de uno de los candidatos proclamados. Esto permitirá que los electores conozcan las candidaturas antes de la votación.
María Guardiola ha destacado que los nuevos Estatutos eliminan la necesidad de una doble urna, simplificando el proceso electoral. Ahora, los afiliados votarán en una lista única que incluye tanto al candidato a la presidencia como a los compromisarios que apoyan esa candidatura. El nuevo sistema también facilita la participación de los afiliados, quienes no necesitarán inscribirse previamente para votar. Cualquier afiliado que haya estado en el partido durante al menos 12 meses y esté al corriente de pago podrá participar en la votación.
Guardiola ha defendido que el PP ha optado por un sistema más simple, representativo y transparente, alineado con la democracia representativa que caracteriza a España. Este enfoque busca fortalecer la base del partido y asegurar que los afiliados tengan un papel central en el proceso político. Guardiola ha criticado a otros partidos, como Sumar y Podemos, argumentando que sus primarias a menudo no reflejan una verdadera democracia interna, sino que son utilizadas para legitimar decisiones ya tomadas.
Fernando López Miras ha subrayado que los nuevos Estatutos buscan aumentar la participación de los afiliados en las decisiones del partido y en los congresos, así como establecer nuevos canales de comunicación con los ciudadanos. Se enfatiza la importancia de la rendición de cuentas de los cargos públicos, quienes estarán obligados a informar a los afiliados y a los órganos de dirección sobre sus acciones y decisiones.
Esta decisión intenta cerrar la controversia iniciada hace pocos días, cuando Esperanza Aguirre se sumaba a Ayuso en su petición de primarias abiertas en el partido. La expresidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, expresó su apoyo a la implementación de un sistema de primarias en el Partido Popular (PP) que se base en el principio de "un militante, un voto". Durante una rueda de prensa en la Real Casa de Correos, Aguirre también consideró la posibilidad de establecer un mecanismo intermedio entre el sistema actual y su propuesta.
Aguirre argumentó que el sistema actual de compromisarios es restrictivo y podría haberle impedido presentarse a las primarias. Según su declaración, este sistema requiere la firma de 600 compromisarios, un proceso que ella considera complicado y que, a pesar de ello, nunca había deseado llevar a cabo.
La expresidenta subrayó que el argumento de quienes defienden el sistema de compromisarios se basa en el resultado de las elecciones internas pasadas, donde Soraya Sáenz de Santamaría ganó en la primera vuelta, pero no obtuvo el 50% necesario según los estatutos del partido. Esto permitió que Pablo Casado, quien había quedado en segundo lugar, ganara en la segunda vuelta gracias al voto de los compromisarios.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, también se ha manifestado a favor de un modelo de primarias que garantice el principio de "un afiliado, un voto" en todo el país. Ayuso ha indicado su intención de presentar propuestas en el próximo Congreso del PP para reforzar este modelo.
El actual presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha manifestado su deseo de revisar el sistema de primarias de doble vuelta que se instauró en 2017 bajo la dirección de Mariano Rajoy. Feijóo reconoció que existe un "nudo gordiano" que necesita ser resuelto y se comprometió a mejorar el sistema para que los compromisarios no puedan anular la decisión de los militantes.
Feijóo hizo referencia al congreso extraordinario del PP de 2018, que se llevó a cabo tras la moción de censura contra Rajoy por parte de Pedro Sánchez. En ese congreso, Pablo Casado ganó la presidencia del partido a pesar de que Sáenz de Santamaría había recibido más apoyo de los afiliados en la primera vuelta. Este evento ha sido un punto de inflexión en la discusión sobre la necesidad de reformar el sistema de primarias. |