 Es la única forma de recuperar el turismo
El secretario de Estado de Turismo, Fernando Valdés, ha participado en la Tourism Innovation Summit de Sevilla, donde ha defendido que las cuarentenas impuestas a los viajeros internacionales deben ser el último recurso porque existe una alternativa más eficaz para que los viajes sean seguros, como es la realización de test en origen a los pasajeros procedentes de zonas de riesgo por COVID-19.
En la mesa de debate 'Recover consumers confidence', el secretario de Estado ha explicado que España lidera una posición "ambiciosa" en la comunidad internacional para que la política de los test before travel se extienda y permita recuperar cierta movilidad en los flujos turísticos.
Un debate que España impulsará este lunes en una cumbre en La Palma organizada en colaboración con la Organización Mundial del Turismo y la World Travel & Tourism Council y que ya ha experimentado algunos avances con la decisión del Consejo de la UE del pasado 13 de octubre que estableció unos criterios comunes para definir los diferentes niveles de riesgo de las regiones europeas y reconoció los test como alternativa a las cuarentenas.
"España siempre ha creído que las cuarentenas no eran una solución efectiva para el control de la pandemia", ha recordado Valdés, que ha instado a los países a acordar otras alternativas que permitan dar confianza a los viajes.
El secretario de Estado ha repasado las oportunidades que se abren con la llegada de los fondos de recuperación europeos, que van a permitir la modernización del sector turístico a través de actuaciones que permitirán avanzar hacia un modelo más sostenible y digital.
Al término de la mesa redonda que ha compartido con el exsecretario general de la OMT Taleb Rifai y el director general de Amadeus España y Portugal, Valdés ha asistido a la ceremonia inaugural de la Tourism Innovation Summit, que ha presidido Su Majestad La Reina.
En los márgenes de la cumbre, el secretario de Estado ha mantenido un encuentro con el vicepresidente de la Junta de Andalucía, Juan Marín, y el secretario general de Turismo, Manuel Muñoz, con quienes ha analizado la situación del sector andaluz y explorado las posibilidades de colaboración que se abren con la llegada de los fondos de recuperación europeos.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha condecorado a un total de 20 militares y civiles, entre oficiales, suboficiales, personal de tropa y marinería y personal civil, con la medalla conmemorativa de la 'Operación Balmis'.
"Este es un acto sencillo, pero a la vez es un acto que sale del corazón. Es un acto en el que ustedes están representando a los miles de hombres y mujeres que con generosidad y entrega sirvieron a España con la 'Operación Balmis'", ha dicho la ministra, anunciando que este no será el único acto de imposición de condecoraciones.
Robles ha querido agradecer a los miles de hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas el que siempre estén con los ciudadanos, sirviendo a los españoles en los momentos más difíciles, "haciéndolo con humanidad, generosidad, entrega y dedicación".
"Este acto es una forma de decirles de todo corazón que España tiene una deuda de gratitud impagable con todos ustedes", ha manifestado sobre unas Fuerzas Armadas de las que, dijo, haber aprendido dos cosas esenciales, que "son una gran familia y que nunca dejan atrás a ninguno de los suyos".
"No dejen nunca atrás a España, sigan comprometiéndose con España y defendiendo y representando como lo hacen, con esa dignidad, con ese orgullo y con esos valores que tienen las Fuerzas Armadas", ha finalizado.
Previamente al acto de imposición, el jefe de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), general del Aire Miguel Ángel Villarroya, ha presentado el informe extenso y detallado de los 98 días de lucha de las FAS contra una crisis sanitaria sin precedentes y de enorme magnitud.
"Este documento tiene vocación de permanecer en el tiempo. Describe el planeamiento, ejecución y resultados del mayor despliegue militar llevado a cabo en tiempos de paz, con un único objetivo, salvar el mayor número de vidas", ha explicado Villarroya.
Por parte de los condecorados, ha hablado el coronel Enrique Bartolomé, director de la Escuela Militar de Sanidad, quien desde el primer momento del inicio de la operación se incorporó a la UCI del Hospital Central de la Defensa Gómez Ulla para asistir a los enfermos, y como él muchos compañeros.
"Teniendo en cuenta que era una crisis sanitaria, todos los participantes de la 'Operación Balmis' se convirtieron en sanitarios", ha señalado en su discurso de agradecimiento que ha puesto en valor la profesión que representa.
"El sanitario siempre fiel a sus deberes, sereno ante el peligro, tanto en los combates como en las epidemias y contagios, desempeñará sus funciones con abnegación y cariñosa solicitud, teniendo en cuenta que el valor, en estos casos, no es solo eminente sino que puede ser heroico".
Con la 'Operación Balmis', y ahora con la actualmente en vigor 'Misión Baluarte', las Fuerzas Armadas han escrito una página de la historia de España, "una página gloriosa", ha recalcado la titular de Defensa.
El enorme despliegue y esfuerzo realizado por los militares en todos los rincones de España para contener y mitigar la enfermedad y sus efectos, por medio de un apoyo continuo y eficaz a diferentes administraciones e instituciones públicas y privadas, ha sido recompensado especialmente con el aprecio de los españoles.
A través de la amplia cobertura que los medios de comunicación y las redes sociales han llevado a cabo sobre las más de 20.000 intervenciones de la 'Operación Balmis', los ciudadanos han podido conocer un poco más y valorar a sus Fuerzas Armadas.
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