El coronavirus se carga la celebración más antigua de la localidad

Este 3 de febrero no va a ser un día fácil para los vecinos de Torrejón, ya que, por primera vez en cinco siglos, no podrán celebrar el Día de San Blas comiendo tortilla, o al menos, no en los parques de la localidad. Y es que el coronavirus ha conseguido lo que no consiguieron ni la viruela ni la gripe española: suspender la celebración más antigua de las que se celebran aún hoy en el municipio.

Y es que la fiesta de la tortilla va mucho más allá de comer tortilla con los amigos. En los días previos al Carnaval los torrejoneros se reunían en el olivar, en pleno barrio de Zarzuela, para pasar un día especial con sus vecinos y amigos. El gigantesco árbol del ahorcado, único árbol protegido por la Comunidad de Madrid en el municipio, daba sombra a aquellos torrejoneros de hace no tantos años.

Pero los tiempos cambian, y el Consistorio decidió centralizar la fiesta en el Recinto Ferial, donde la música y el reparto de tortilla se convirtieron en el reclamo perfecto para mover la celebración. Hasta tal punto creció en los últimos noventa la fiesta de la tortilla que se creó el tradicional concurso de Tortillas, que ha servido de inspiración para concursos similares en otros municipios.

Pero el intenso frío de febrero, sumado a la decisión del Gobierno Local de dejar de repartir tortilla, allá por 2013, fueron matando poco a poco la fiesta, hasta el punto de obligar al Ayuntamiento a una reformulación para intentar salvar el Día de la Tortilla. Así, regresó el reparto y se cambió de fecha la celebración, lo que provocó una oleada de críticas al Gobierno Local que obligó a desvincular las dos "patas" de la fiesta. El Gobierno realizaría sus "actividades institucionales" el primer fin de semana de febrero, mientras que los torrejoneros seguirían comiendo la tortilla el 3 de febrero, como marca la tradición. Y así ocurrió en 2020: Torrejón convirtió el Día de la Tortilla en una fiesta abierta a vecinos del resto de Madrid, al mismo tiempo que los torrejoneros llenaban los parques para comer la tortilla al estilo tradicional.

Pero en 2021 la Fiesta tendrá que volver a reinventarse. La tortilla se comerá, pero cada uno desde su casa, y compartiendo las fotos a través de redes sociales, en lugar de en compañía de amigos y en los parques de la localidad.