"Rosarito siempre a favor de la raza gitana o negra!" aseguró la madre de Sharay que bloqueó a los tuiteros críticos

Vergonzoso espectáculo el que ofrecieron una a través de la gala y la otra a través de Twitter tras la eliminación de Saray en la última gala de Batallas de "La Voz", el programa en el que participaba. Sharay tenía que enfrentarse a Brequette, una estupenda cantante de raza negra y voz de negra que deslumbró a todos con su actuación. Sharay solo pudo ser una mera comparsa ante los giros y la personalidad de su rival. Nunca se encontró cómoda, estaba nerviosa y no pudo demostrar al coach que se merecía un puesto.

Pero claro, si tenemos en cuenta que es una niña que no está acostumbrada a oír un NO, salió la verdadera personalidad de Saray cuando Bisbal le confirmó que no era la elegida. Demostrando un absoluto desprecio, por el público, el coach y el programa se fue enfurruñada negando el saludo a Luís Fonsi. Sharay lo intentó arreglar por Twitter pidiendo disculpas y asegurando que es natural en ella. "Soy llorona e impulsiva" reconoció ante un barrio tuitero que la convirtió en TT tachándola de malcriada, niñata, prepotente y chula.

Kiko Hernández le nombró Miss prepotencia y algunos tuiteros iban más allá haciendo comentarios muy despectivos.

Pero la nota de humor (por lo lamentable) la puso su mamá, Mara Colás dando una lección maestra de lo que no puede hacer un personaje que ha trabajado en un medio de comunicación. Si Sharay había perdido pocos seguidores, la madre que la parió lo terminó de arreglar acusando a Rosario de favorecer a Brequette por ser negra o a Jorge González por ser gitano. Tuvo lo que en el argot se llama un "Mariló Montero" sacar los pies del tiesto y poner cara de boba como si no hubiera pasado nada.

Y es que, Mara se excedió con algunos comentarios que lejos de agradecer la plataforma que ha supuesto para su hija, acusaba al coach de darle una patada en "la Voz" además de cuestionar el criterio de los cantantes. Con David Bisbal fue más allá retuiteando comentarios fuera de tono y bloqueando y censurando a los tuiteros que expresaban su opinión sobre su hija.

Ha sido el único concursante que se ha ido dando un portazo, la peor manera de salir de cualquier lado demostrando una falta de educación y de clase absoluta por mucho que vivan entre la jet set madrileña. Es una pena que una chica que empezaba a salir en medios y crearse una imagen lo haya tirado todo por la borda por una rabieta de niño de tres años.

A buen seguro que pronto la veremos con disco producido por su padre la pregunta es: ¿alguien sería capaz de comprarlo?